MADRID, 9 Jul. (EUROPA PRESS) -
Médicos del Austin Health de Melbourne (Australia) han presentado en la Reunión Anual de la Sociedad Europea de Anestesiología, celebrada en Viena (Austria), el caso de un hombre que sufrió un incendio en su cavidad torácica durante una cirugía cardíaca urgente causada por la fuga de oxígeno de un pulmón roto.
En agosto de 2018, un hombre de 60 años se sometió a la reparación urgente de una disección aórtica ascendente, un desgarro en la capa interna de la pared de la aorta en el pecho. El paciente tenía antecedentes de enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) y se había sometido a un bypass coronario un año antes.
A medida que los cirujanos, liderados por la doctora Ruth Shaylor, comenzaron a operar, notaron que el pulmón derecho del hombre estaba pegado al esternón superpuesto con áreas de pulmón sobreinflado y destruido (bulas pulmonares, a menudo causadas por la EPOC). A pesar de una disección cuidadosa, una de estas bulas fue perforada causando una fuga de aire sustancial. Para prevenir la dificultad respiratoria, los flujos de gases anestésicos se incrementaron a 10 litros por minuto y la proporción de oxígeno al cien por cien.
Poco después, una chispa del dispositivo de electrocauterización (que utiliza calor para detener la hemorragia de los vasos) encendió un paquete quirúrgico. El fuego se extinguió inmediatamente sin que el paciente sufriera lesiones. El resto de la operación se llevó a cabo sin incidentes y la reparación fue un éxito.
"Aunque solo hay unos pocos casos documentados de incendios en la cavidad torácica, en todos ellos han estado presentes estos paquetes quirúrgicos, electrocauterización, aumento de concentraciones inspiradas de oxígeno y pacientes con EPOC o enfermedad pulmonar preexistente. Los cirujanos y anestesistas deben ser conscientes de que pueden producirse incendios en la cavidad torácica si un pulmón está dañado o hay una fuga de aire por cualquier motivo, y que los pacientes con EPOC están en mayor riesgo", explica Shaylor.