MADRID, 14 Nov. (EUROPA PRESS) -
Más de la mitad de los pacientes con Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) que precisan hospitalización por una agudización son ingresados en los Servicios de Medicina Interna de los hospitales españoles, según se pondrá de manifiesto en la mesa 'Comorbilidades en la EPOC', que tendrá lugar en el transcurso del 43 Congreso Nacional de Medicina Interna de la SEMI-8 Congreso de la Sociedad Asturiana de Medicina Interna (SAMIN)-8 Congreso Ibérico de Medicina Interna en Gijón, Asturias (23 al 25 de noviembre).
En dicha mesa, se analizarán las principales patologías y comorbilidades que se relacionan con la EPOC y se ha puesto de "manifiesto la importancia del manejo integral por parte del médico internista de todas ellas" para un correcto control de la EPOC, una enfermedad, tal y como se ha reiterado, "compleja, heterogénea y multisistémica".
"Se trata de una enfermedad que se suele acompañar en un alto porcentaje de otras enfermedades o comorbilidades. El manejo de los pacientes con EPOC no debe centrarse sólo en la patología pulmonar, sino que hay que llevar a cabo una búsqueda activa de esas comorbilidades. El abordaje y tratamiento correcto de estas comorbilidades resultan fundamentales para mejorar la calidad de vida del paciente, disminuir las exacerbaciones, evitar reingresos y disminuir la morbimortalidad de los pacientes con EPOC", ha comentado María Gómez Antúnez, médico internista SEMI y moderadora de la mesa.
Por su parte, según explica la doctora Belén Alonso, coordinadora del Grupo de Trabajo de EPOC de SEMI, "las comorbilidades en los pacientes con EPOC son más frecuentes en pacientes con más edad, en aquellos con una enfermedad pulmonar más avanzada, y en los hospitalizados por una exacerbación aguda".
Se han descrito hasta 73 comorbilidades asociadas a la EPOC. Según los diferentes trabajos publicados, dos de ellos por el Grupo de Trabajo EPOC de la SEMI - estudios ECCO y ESMI- las principales comorbilidades de los pacientes EPOC son: la hipertensión arterial, la dislipemia, la diabetes mellitus, la insuficiencia cardíaca, la fibrilación auricular, la cardiopatía isquémica, la enfermedad renal crónica, la enfermedad arterial periférica, y la osteoporosis.
Son menos frecuentes la enfermedad por reflujo gastroesofágico, la hepatopatía crónica, neoplasia pulmonar, la depresión o la enfermedad cerebrovascular. La EPOC "es el paradigma de enfermedad multisistémica", por lo que un manejo integral y multidisciplinar de estos pacientes es una de las claves para mejorar su atención, siendo propio del médico internista el abordaje global de las personas enfermas.
El tratamiento de la agudización se basa en fármacos broncodilatadores de acción corta, corticoides en las agudizaciones moderadas- graves y antibióticos si se sospecha que la causa de la agudización es una infección respiratoria aguda de causa bacteriana. En muchos casos es preciso la oxigenoterapia para conseguir adecuados niveles de oxigenación en sangre.
Por el contrario, el tratamiento del EPOC en fase estable está basado en broncodilatadores de acción prolongada, solos, combinados entre sí o asociados a los fármacos antiinflamatorios como los corticoides inhalados.
"Un buen soporte nutricional y la realización de actividad física regular acorde a la condición física y fase de la EPOC son también claves en el tratamiento de esta patología. Además se debe hacer un tratamiento óptimo de las comorbilidades, con un abordaje individualizado", según se pondrá de manifiesto durante el transcurso de la mesa.
Según el último informe del Ministerio de Sanidad sobre las enfermedades respiratorias, la EPOC en población de 40 y más años se sitúa en 33,9 casos por cada 1.000 habitantes, siendo más del doble en hombres que en mujeres (47,7 frente a 21,3).
La prevalencia aumenta con la edad a partir de los 40 años de forma progresiva hasta alcanzar la mayor frecuencia en el grupo de edad de 80 a 84 años.
En el año 2019 los fallecimientos por EPOC en nuestro país fueron de 13.808 (9.907 en hombres y 3.901 en mujeres), con una tasa bruta de mortalidad de 29,3 defunciones por 100.000 habitantes, habiendo descendido respecto a 2018.
La EPOC causa 2,5 veces más defunciones en hombres que en mujeres. Desde el año 2001 hasta 2019 hay una tendencia descendente de la mortalidad por EPOC, tanto en hombres como en mujeres, disminuyendo un 43 por ciento, en varones casi un 50 por ciento y en mujeres un 33 por ciento.
Por último, en la mesa también se hablará de la importancia de que "desde la Medicina Interna hagamos un esfuerzo para reducir el infradiagnóstico de la EPOC y de sus comorbilidades". "Los internistas tenemos que tomar conciencia de que esta enfermedad no es solamente una patología pulmonar, sino una patología multisistémica, compleja, heterogénea y muy variable hasta en un mismo paciente", han detallado.
La tendencia actual es que la edad de estos pacientes está aumentando, cada vez hay más mujeres que presentan esta patología y se comporta de manera diferente incluso con comorbilidades distintas a los varones, con una media de 4-5 comorbilidades asociadas a la EPOC y, por tanto, en la atención de estos pacientes el papel del internista es fundamental.