VALENCIA, 29 Jun. (EUROPA PRESS) -
Más del 32 por ciento de las parejas que se sometieron a tratamientos de reproducción asistida en 2008 eran de nacionalidad extranjera, y este porcentaje continuará al alza en 2009, según las previsiones del Centro Médico de Reproducción Asistida (CREA).
La principal causa de este flujo migratorio reproductivo, según explicaron, se basa en que en el campo de la reproducción asistida, la legislación española es una de las más progresistas del mundo, "siendo a la vez de las más rigurosas a la hora de aplicar la normativa europea", matizaron.
A diferencia de muchos de los países europeos, en España, la legislación vigente contempla técnicas de reproducción asistida que implican donación de óvulos, la selección genética de embriones para evitar el riesgo de transmisión de determinadas enfermedades, así como el absoluto anonimato de los donantes de semen y óvulos.
En concreto, la doctora Carmen Calatayud, codirectora del centro médico, destacó que el perfil de los pacientes extranjeros es muy amplio, así como las principales razones de esta migración: "desde parejas casadas, mujeres solteras e incluso parejas homosexuales acuden a la clínica, ya que la legislación española abarca la realización de diferentes técnicas no permisibles en otros países".
Asimismo, Calatayud subrayó que los tratamientos más demandados son los que requieren de donación de óvulos. "Nuestros principales pacientes extranjeros proceden de Reino Unido. Aunque en ese país sí está permitida la donación de óvulos, ésta no se realiza de manera anónima y las listas de espera son infinitas, ya que apenas existe una concienciación de donación de gametos", dijo.
En los últimos años, añadió, se ha detectado un aumento de las parejas italianas que acuden a CREA para someterse a tratamientos que no se pueden realizar en este país. Como destacó Calatayud, "actualmente, el 75 por ciento de los pacientes italianos se realizan tratamientos que implican donación de óvulos, alrededor de un 10 por ciento nos visitan porque requieren el uso de semen de donante, bien porque son mujeres sin pareja o bien porque no se pueden utilizar espermatozoides de su pareja para conseguir el embarazo". "Otro 10 por ciento se realizan tratamientos para poder seleccionar embriones sanos, ya que algún miembro de la pareja padece alguna enfermedad hereditaria", señaló.
A consecuencia del aumento de pacientes extranjeros, la doctora Carmen Calatayud destacó que la mayor parte de los profesionales que trabajan en CREA son bilingües en diferentes idiomas: inglés, italiano, francés y alemán.