MADRID, 24 Ene. (EUROPA PRESS) -
Nefrólogos, hepatólogos y farmacéuticos han coordinado la redacción de una guía internacional sobre el tratamiento de la hepatitis C en pacientes con enfermedad renal crónica.
La guía, publicada en la revista 'Journal of Nephrology', ayudará a la toma de decisiones de nefrólogos y hepatólogos que, tras más de dos años de trabajo, podrán encontrar en ella los fármacos más adecuados para tratar los distintos genotipos del virus de la hepatitis C en estos pacientes.
Este manual ha sido promovida y coordinado por la Asociación Española de Hígado y Riñón (AEHR), y ha contado con profesionales de los hospitales La Mancha-Centro de Alcázar de San Juan (Ciudad Real), Clínic de Barcelona y la Princesa de Madrid.
Su coordinación ha corrido a cargo del presidente de la AEHR, Sami Aoufi Rabih y la secretaria de la Junta Directiva de la AEHR y responsable del Servicio de Nefrología del Hospital La Mancha-Centro, Rebeca García Agudo.
En España, existen más de 1.500 pacientes en diálisis infectados por el virus de la hepatitis (VHC). La prevalencia es mayor en los pacientes con enfermedad renal crónica que aún no han iniciado diálisis o los que tienen un trasplante renal. El último estudio de prevalencia del VHC en diálisis lo llevó a cabo la AEHR en 2013 y situó la prevalencia del VHC en diálisis en el 5,6 por ciento, frente al 3 por ciento de la población general.
AVANCES EN LOS TRATAMIENTOS
Hasta 2014, para el tratamiento de la hepatitis C solo se disponía de interferón y ribavirina, lo que ocasionaba muchos y graves efectos secundarios en los pacientes, especialmente si padecían insuficiencia renal, y la respuesta al tratamiento era muy baja, con un máximo del 40 por ciento de erradicación del virus. Esto llevaba a los médicos a evitar el tratamiento en estos pacientes, por lo que el aumento de la prevalencia de la hepatitis C durante décadas se ha mantenido inalterable.
A partir de esa fecha han surgido los inhibidores de la proteasa, cuya respuesta antes el virus C puede llegar al 95 por ciento y los eventos adversos son mínimos. Según el doctor Sami Aoufi, es posible que en un futuro próximo el virus de la hepatitis C tenga una prevalencia muy baja o incluso sea erradicado, lo cual constituye uno de los objetivos que pretende facilitar esta guía.