MADRID 28 May. (EUROPA PRESS) -
Madrid, Granada, Huelva, Cantabria, Málaga y Sevilla son las provincias con más visitas al alergólogo, según los datos de Doctoralia sobre las zonas que encabezaron las reservas referidas a servicios relacionados con la alergia en 2024.
Las personas que solicitan servicios de alergología requirieron de una media de 2 sesiones para tratarse. En este sentido, según los datos de Doctoralia, las provincias de Cantabria y Valencia lideran el ranking de los territorios con más recurrencia por paciente en las reservas de alergología, con 3,1 citas al año, seguidas de Cádiz, con 2,6. También destaca la recurrencia en Murcia, donde las reservas por persona han incrementado un 53% entre 2023 y 2024, pasando de 1,6 a 2,5 visitas.
Aunque varios factores influyen en el empeoramiento de los síntomas, algunas zonas tienen características que hacen a sus habitantes más vulnerables a estas afecciones. En España, las alergias más comunes están vinculadas a factores ambientales, especialmente en primavera y otoño.
Los alérgenos más frecuentes son el polen y los ácaros de polvo. En el caso del polen, España tiene muchas especies vegetales que producen grandes cantidades de polen, siendo los más alergénicos las gramíneas, predominantes en territorios húmedos como Cantabria, el olivo, común en Andalucía o el plátano de sombra que podemos encontrar en ciudades como Madrid o Valencia.
En cuanto a los ácaros de polvo, según los datos de la Sociedad Española de Alergología e Inmunología Clínica (Seiac), cerca de dos millones de españoles podrían padecer algún tipo de alergia provocada por los ácaros, siendo los territorios más húmedos los más propensos a sufrirlo.
Algunas recomendaciones de la alergóloga y colaboradora de Doctoralia, Encarnación Antón Casas, son "evitar ventilar o hacer ejercicio a primera o última hora del día, usar gafas de sol aún en días nublados, ducharse y lavarse la cara y cuero cabelludo antes de acostarse, evitar salidas al campo, por supuesto no tumbarse en el prado", en el caso de los alérgicos al polen.
En el caso de los alérficos a los ácaros del polvo, la doctora Casas recomienda "lavar la ropa de cama a temperatura elevada, por encima de los 70 ªC, usar protectores de colchones y almohadas con tejidos antiácaros, evitar barrer, utilizar aspiradores con filtros HEPA, reparar humedades (si existen) y utilizar deshumidificadores".