MADRID, 16 Jul. (EUROPA PRESS) -
Las lesiones medulares por zambullidas de cabeza durante el verano representan el 6 por ciento del total de los casos anuales y "no dejan de incrementarse año tras año", según ha señalado Jesús Porta Etessam, director de la Fundación del Cerebro, de la Sociedad Española de Neurología (SEN).
De acuerdo a los datos de la SEN, cada año se producen en España al menos unos 100.000 nuevos casos de traumatismo craneoencefálico (TCE) y unos 600 de lesiones medulares de origen traumático. Aunque la mayoría de las consultas por TCE son "leves", el traumatismo craneoencefálico es la primera causa de muerte e incapacidad en la población menor de 45 años en los países desarrollados.
Por otra parte, desde la SEN advierten de que las personas con lesiones medulares son entre dos y cinco veces más propensas a morir prematuramente, y en el 50 por ciento de los casos de origen traumático ocasionan tetraplejia.
"Casi el 50 por ciento de las lesiones medulares y TCE que se producen al año son debidos a los accidentes de tráfico y casi un 40 por ciento a accidentes laborales y deportivos. En verano, al aumentar los desplazamientos por carretera, cuando debido al calor se descuida la utilización de cascos protectores u otras medidas de seguridad y al incrementarse la práctica de deportes y, sobre todo, los acuáticos, es cuando se registra un mayor número de accidentes de este tipo", explica el especialista.
En este contexto, añade que todas las causas de lesiones de médula están descendiendo en incidencia, "menos las provocadas por causas deportivas". "Es importantísimo proteger nuestra cabeza de agresiones externas. En el coche debemos llevar siempre puesto el cinturón de seguridad y bien ajustados los reposacabezas, y en la moto y en actividades y deportes de riesgo, utilizar siempre casco. Los niños deben viajar siempre en las sillas especiales para el coche y usar casco cuando utilicen la bici, el patinete", señala el doctor Jesús Porta.
Por otra parte, de todas las lesiones medulares que se producen anualmente en España, un "porcentaje destacado" corresponde a sucesos evitables, tras actividades deportivas y de ocio. El perfil tipo de los afectados es el de un joven menor de 30 años, que suele sufrir el accidente en los meses de verano. Niños y adolescentes son los que con mayor frecuencia se ven afectados por traumatismos craneoencefálicos o lesiones medulares, generalmente por impudencias a la hora de introducirse en el agua, detalla el doctor.
"No solo por lanzarse al agua desde gran altura, sino porque muchas veces estas prácticas van asociadas al consumo de alcohol u otras sustancias. Comprobar la ausencia de obstáculos y la profundidad del lugar donde nos vayamos a sumergir, utilizar los brazos como protección de nuestro cuerpo si nos tiramos de cabeza, vigilar a los más pequeños cuando estén cerca del agua y no consumir drogas antes de realizar cualquier actividad acuática, son las principales medidas a adoptar para evitar estos accidentes", comenta Porta.
Asimismo, también reivindica la importancia del uso de chaleco salvavidas al utilizar cualquier tipo de embarcación acuática, ya que "pueden prevenir hasta el 85 por ciento de las muertes". A esto añade que hay que tener precaución a la hora de utilizar motos acuáticas, ya que la posibilidad de lesión es "8,5 veces mayor que en otras embarcaciones a motor", y en toboganes de agua: "un 18% de los accidentes que se producen en un medio acuático se producen en toboganes de agua, una cuarta parte de ellos por colisión entre personas".
Por último, resalta que tanto entre niños como adultos la práctica de deportes no acuáticos también parece aumentar en la época estival. "Los accidentes relacionados con el ciclismo o con montar a caballo también son frecuentes en esta época y pueden ser graves. Por lo tanto conviene volver a recordar la importancia de utilizar casco protector al realizar estos deportes así como evitar realizar actividades que requieran de dificultad técnica si no disponemos de entrenamiento previo o habilidad suficiente", ha concluido el doctor Jesús Porta.