MADRID, 15 Jun. (EUROPA PRESS) -
El papel de los laboratorios de urgencias es decisivo ya que entre el 60 y el 70 por ciento de las decisiones clínicas que implican ingresos, altas y actuaciones terapéuticas están apoyadas en los resultados de laboratorio y, en este sentido, en muchas patologías de carácter urgente el factor tiempo hasta el inicio del tratamiento puede condicionar el pronóstico del paciente.
Por esta razón y con el objetivo de actualizar conocimientos en este campo, la Comisión de Magnitudes biológicas relacionadas con la urgencia médica de la Sociedad Española de Bioquímica Clínica y Patología Molecular (SEQC) celebra el curso 'Actualización en Laboratorio de Urgencias'.
"No sólo las unidades de cuidados críticos o los servicios de urgencia son los peticionarios de analíticas urgentes, sino que en la actualidad son muchos otros servicios médicos los que requieren tiempos de respuesta cortos para el inicio de tratamientos, como las Unidades de Oncología y Hematología o controles intraoperatorios en quirófanos; ello conduce a un aumento de las peticiones al laboratorio de urgencias ", ha indicado el presidente de Comisión de Magnitudes biológicas relacionadas con la urgencia médica de la SEQC, Luis García de Guadiana.
AVANCES PARA UN RÁPIDO DIAGNÓSTICO
En los últimos años se han producido importantes avances que posibilitan un diagnóstico más rápido y una mayor calidad asistencial como los ensayos de alta sensibilidad para la medición de 'troponina cardiacs' que permiten el uso de algoritmos con los que es posible descartar el infarto agudo de miocardio.
En la actualidad se está debatiendo el papel de los marcadores de infección en el diagnóstico de la 'sepsis', ya que la reciente definición publicada este mismo año no los incluye como herramienta para el manejo del paciente con sospecha.
Otro de los avances a destacar es la incorporación a los laboratorios de urgencias de contadores para líquidos biológicos, que permiten mejorar la estandarización del recuento celular y ofrecen resultados fiables y seguros en un corto período de tiempo así como la disponibilidad cada vez más frecuente de los equipos Point of Care Testing (POCT), herramienta para disminuir los tiempos de respuesta.
Recientemente, la Comisión de Magnitudes relacionadas con la Urgencia Médica ha revisado y actualizado un documento sobre cuáles son aquellas magnitudes que deben ser medidas de forma urgente.
En este documento se ha contado con la colaboración de la Comisión de Biología Hematológica y el reconocimiento de determinados signos de alarma en el hemograma, que recomendarían la observación del frotis de sangre periférica ya que contribuye tanto a un diagnóstico rápido, como a la instauración del tratamiento más adecuado y eficaz.
"Evidentemente muchas de las magnitudes que se determinan en un laboratorio de urgencias también son medidas en otros laboratorios; sin embargo, existen magnitudes que pueden considerarse como características del laboratorio de urgencias", ha explicado el doctor Guadiana.
En especial, "aquellas que son necesarias para establecer un diagnóstico precoz o que van a condicionar en gran medida la actitud terapéutica del médico, así como la solicitud de otras pruebas complementarias, como la troponina cardiaca en el síndrome coronario agudo o la procalcitonina en la sepsis", concluye.