TOLEDO 1 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Plan Estratégico de Prevención y Control de la Infección por VIH y otras Infecciones de Transmisión Sexual de Castilla-La Mancha promueve la realización de test rápidos de detección y apuesta por una prueba diagnóstica del sida que se incorpore a la práctica clínica de una manera habitual con el fin de identificar precozmente a las nuevas infecciones por este virus.
Este plan, con horizonte 2014-2017, contempla un montante económico de 76,6 millones de euros y agrupa "seis grandes líneas estratégicas de actuación", tal y como lo ha puesto de manifiesto la presidenta regional, María Dolores de Cospedal, durante la presentación de este plan con motivo del Día Internacional de la Lucha contra el Sida.
Una de las seis líneas estratégicas, según ha detallado Cospedal, es la de la identificación de manera precoz de nuevos casos de infección y para ello se facilita el acceso a la prueba del VIH a toda persona que lo solicita. Esta prueba se puede realizar en cualquier centro sanitario de la red pública, es una prueba gratuita y confidencial.
Durante la presentación, Cospedal ha señalado que en Castilla-La Mancha, desde el comienzo de la epidemia en 1981 y hasta el último informe correspondiente a junio del año 2014, se han notificado al registro de Sida de la región 1.533 casos.
Asimismo, ha destacado que esta enfermedad afecta mayoritariamente a personas del sexo masculino en las edades medidas de la vida. Así, el 82,5 por ciento de los casos diagnosticados en Castilla-La Mancha desde 1981 corresponden a varones. La tasa media anual de nuevas infecciones por VIH en el periodo 2008-2013 en la región ha sido de 4,22 casos por cada 100.000 habitantes, por debajo de la media nacional que se sitúa en 10,3 casos.