Jiménez asegura que aprovechará la presidencia de la UE para fomentar acciones frente al sida y la mortalidad infantil

Actualizado: jueves, 26 noviembre 2009 18:51

MADRID 26 Nov. (EUROPA PRESS) -

La presidencia española de la Unión Europea supondrá, por un lado, "una oportunidad para fomentar acciones frente a riesgos globales como el cambio climático, la mortalidad neonatal, el sida y la exclusión social", y por otro, "para poner en marcha iniciativas que sigan posicionando a nuestros país en un lugar relevante en la escena internacional", según afirmó la ministra de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez, durante la clausura del ciclo 'La sanidad española en el año 2009', celebrado en la sede de la Real Academia Nacional de Medicina (RANM).

Según Jiménez, las líneas que defenderá España están basadas en "la universalidad, en el acceso a una atención de calidad, equidad y solidaridad de los sistemas de salud de sus estados miembros". "Se impulsará además, la coordinación entre la UE y la Organización Mundial de la Salud (OMS) en la lucha frente a determinados problemas, como son disminuir las desigualdades en nutrición, mejorar el acceso al agua potable o fomentar la relaciones sexuales seguras, entre otras", apuntó.

En esta misma línea, la ministra recordó que tanto España como la Unión Europea apoyan la Estrategia Mundial y el Programa de Acción para la Sanidad Pública, la Innovación y la Propiedad intelectual de la OMS, que fomentan el acceso de los países menos desarrollados a los medicamentos y a aquellas tecnologías que permiten vencer la enfermedad o atenuar sus efectos.

Por otra parte, durante su conferencia, la responsable de Sanidad afirmó que el Gobierno de España está llevando a cabo una "intensa actuación" en el campo de la cooperación internacional con el objetivo de encauzar la globalización de forma que se puedan aprovechar sus ventajas y minimizar sus riesgos.

"La globalización --señaló-- ha generado mayor interdependencia, y ha transformado la protección y el fomento de la salud en un reto cada vez más importante para la política exterior y para la gobernabilidad a escala mundial". "Se trata de un proceso que nos afecta a todos y que plantea grandes retos y ofrece muchas oportunidades", concluyó.