MADRID, 3 Mar. (EUROPA PRESS) -
El consumo de alcohol entre los jóvenes representa un problema en España ya que cada año unos 20.000 menores sufren una intoxicación etílica pero, de estos, solo uno de cada cuatro acaban siendo atendidos por los servicios de Urgencias, según ha alertado la Sociedad Española de Medicina del Adolescente (SEMA).
Esta sociedad científica, perteneciente a la Asociación Españolas de Pediatría (AEP), organiza este fin de semana en Madrid un curso internacional en el que más de 200 pediatras abordarán las principales problemáticas que afectan a los adolescentes españoles.
"La permisividad de España con el alcohol es total", ha destacado Félix Notario, miembros de la SEMA, que lamenta que hasta el 78 por ciento de los menores admita que resulta fácil obtenerlo.
Esto explica que hasta el 83,9 por ciento de los estudiantes de entre 14 y 18 años ha probado alguna vez en la vida el alcohol, el 74 por ciento en el último mes, según los últimos datos de la encuesta escolar del Ministerio de Sanidad.
Ante esta situación, Notario ha reclamado tomar medidas de forma "urgentísima" e implicar tanto a familiares, autoridades como a profesionales de la salud.
"La adolescencia es una etapa crucial de la vida, expuesta a grandes riesgos debido a la adopción de técnicas y conductas que pueden extenderse a la edad adulta, por lo que es necesario desarrollar habilidades pediátricas específicas a la hora de abordar las consultas médicas en esta etapa", según este experto.
Además, al consumo de alcohol se añade el problema del tabaquismo adolescente, ya que España es el país de la Unión Europea en el que los jóvenes comienzan a fumar a una edad más temprana, concretamente antes de los 14 años.
El número de fumadores entre los 14 y 18 años es muy elevado, ya que hasta el 33 por ciento de las chicas y el 29 por ciento de los chicos consumen tabaco, según ha recordado este experto de la SEMA.
A ello hay que unir su preocupación por la mala alimentación o el sedentarismo, que favorecen que las cifras de obesidad ronden ya al 20 por ciento de los adolescentes.
EL TIEMPO FRENTE A LAS PANTALLAS, UN PELIGRO
"No resulta conveniente que los adolescentes pasen más de 4 horas frente a las pantallas, este tipo de conductas pueden llegar a afectar a sus habilidades sociales y contribuyen al sedentarismo", según Notario.
Entre sus propuestas, abogan por incluir la nutrición como parte de las asignaturas, fomentando "comedores saludables", defiende este experto de la SEMA, que también ha mostrado su preocupación por el incremento de denuncias de acoso a profesores por parte de sus alumnos.
En concreto, han lamentado que más de 2.000 docentes hayan denunciado amenazas, conductas agresivas y faltas de respeto por parte de sus alumnos a lo largo del pasado curso escolar. "Aunque pueda parecer sorprendente, este tipo de comportamientos son cada vez más frecuentes entre los adolescentes y conviene detectarlos cuanto antes", según Notario.
Además, lamenta que "a pesar de que los móviles están prohibidos, los menores los llevan a clase, graban a sus profesores, modifican su aspecto y publican el montaje en 'Twitter' o 'Instagram' donde sus compañeros lo comentan".