La importancia de un diagnóstico preciso para un tratamiento más dirigido en personas con epilepsia

Mujer tumbada en el suelo, epilepsia, inconsciente
Mujer tumbada en el suelo, epilepsia, inconsciente - GETTY IMAGES/ISTOCKPHOTO / TUNATURA - Archivo
Publicado: jueves, 6 febrero 2020 13:41


MADRID, 6 Feb. (EUROPA PRESS) -

La doctora de la Unidad de Epilepsia del Hospital La Luz, Carla Anciones, ha destacado la importancia de hacer un diagnóstico preciso para poder aplicar el tratamiento más dirigido posible en pacientes con epilepsia y mejorar así su calidad de vida, con motivo del Día Internacional de la Epilepsia que se celebrará el 10 de febrero.

La epilepsia es uno de los trastornos neurológicos más frecuentes, que se caracteriza por la predisposición a padecer crisis epilépticas de manera crónica. Esto se produce por una actividad eléctrica cerebral anómala que el cerebro no puede controlar espontáneamente.

La doctora ha explicado que se trata de una enfermedad que responde a múltiples causas. Los avances científicos están revelando cada vez una mayor implicación de la genética y de las enfermedades autoinmunes, pero la explicación más frecuente responde a lesiones estructurales como malformaciones del desarrollo de la corteza cerebral, lesiones vasculares, tumores o traumatismos, así como trastornos metabólicos.

La enfermedad puede desarrollarse en cualquiera de las etapas de la vida, aunque las más frecuentes son durante el neurodesarrollo en la etapa pediátrica o con la neurodegeneración generada durante la tercera edad. Las crisis epilépticas suponen un riesgo elevado de lesiones físicas, así como un impacto en la capacidad intelectual, la calidad de vida y la adaptación a la vida social y laboral.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), una de cada diez personas sufrirá al menos una crisis epiléptica a lo largo de su vida. En concreto, la epilepsia afecta a unas 700.000 personas en España y a unas 50 millones de personas en todo el mundo.

UN TRATAMIENTO ESPECIALIZADO Y MULTIDISCIPLINAR

Para detectar las posibles lesiones estructurales, se utilizan diversas técnicas diagnósticas que deben ser "ejecutadas y evaluadas por personal especializado", según afirma la doctora Anciones. Entre ellas, técnicas de neurofisiología (electroencefalografía), neurogenética, neurorradiología, medicina nuclear y neurocirugía.

Aproximadamente 2 de cada 3 casos se controlan con tratamiento farmacológico, pero ciertos pacientes pueden beneficiarse de una cirugía abierta o una cirugía mínimamente invasiva como la termocoagulación o la radiocirugía con Gamma Knife. Otra opción es la de los tratamientos dirigidos como la terapia específica para epilepsias genéticas o de origen inmunológico.

"Lo importante es hacer un diagnóstico preciso para poder aplicar
el tratamiento más dirigido posible", ha asegurado la especialista del Hospital La Luz. En el Servicio de Neurología de este hospital cuentan con una consulta especializada donde se ofrece un diagnóstico y un seguimiento multidisciplinar de la epilepsia, que va desde la neurofisiología hasta la neurorradiología y la neuropsicología.

El objetivo es que los pacientes epilépticos tengan una "puerta de acceso" a técnicas y estrategias para un diagnóstico y un tratamiento correcto de la enfermedad, que permita mejorar su calidad de vida.