SEVILLA, 29 May. (EUROPA PRESS) -
Profesionales del Hospital Universitario Virgen del Rocío de Sevilla han participado con éxito en una cadena de tres trasplantes renales de donante vivo cruzado que se acaba de realizar en España.
La intervención, que requiere de una "gran coordinación" entre los equipos de trasplantes separados por miles de kilómetros en el país, se ha realizado de manera simultánea con otros hospitales de Barcelona y de Salamanca.
El trasplante renal cruzado se basa en el intercambio de donantes de riñón de vivo entre dos o más parejas. Su objetivo es ofrecer a pacientes con insuficiencia renal crónica la posibilidad de recibir un injerto de donante vivo, gracias a la generosidad de su pareja o familiar, aunque sean incompatibles.
En estos casos, se introduce su información en una base de datos de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT), en la que existen otras parejas en dicha situación. Un sistema informático analiza la posible compatibilidad cruzada entre los donantes y los receptores de las distintas parejas.
Si finalmente, existe compatibilidad cruzada entre diferentes parejas, se desarrolla el intercambio de donantes vivos entre receptores en un complicado proceso logístico y organizativo en el que participan equipos de distintos hospitales, coordinados por la ONT. De esta manera se garantiza el deseo de dar un riñón y que su familiar pueda ser trasplantado, aunque no se trate de una donación renal directa.
A finales del año pasado, se habían realizado en España un total de 186 trasplantes cruzados. En 2017 dos hospitales andaluces participaron en este tipo de actividad: el Regional de Málaga y el Puerta del Mar de Cádiz.
Los trasplantes renales de donante vivo constituyen en la actualidad la mejor opción de tratamiento renal sustitutivo para pacientes con enfermedad renal crónica. Máxime, cuando dentro del ámbito familiar es habitual la compatibilidad entre donante y receptor.
Sin embargo, en ocasiones se pueden presentan incompatibilidades, tales como grupo sanguíneo o anticuerpos preformados, que impiden la donación directa entre los familiares o las personas del entorno cercano al paciente.
En estos casos, es cuando el proceso de donación cruzada permite el intercambio de un riñón entre dos o más parejas de donantes y receptores, de forma que cada receptor reciba un órgano compatible y sano que lo ayude a superar su problema de salud.
Según ha precisado el Hospital Virgen del Rocío a través de un comunicado, tanto el paciente trasplantado en el Hospital Universitario Virgen del Rocío como la persona que ha donado el riñón se encuentran en buen estado de salud y evolucionan favorablemente de la intervención.