MADRID 19 Mar. (EUROPA PRESS) -
El Grupo Español de Trasplante Hematopoyético (GETH), de la Sociedad Española de Hematología y Hemoterapia (SEHH), ha elaborado un documento de actuación frente a la enfermedad causada por el nuevo coronavirus, denominada Covid-19, en receptores de trasplante de progenitores hematopoyéticos (TPH), denominado genéricamente como trasplante de médula ósea, y pacientes oncohematológicos en general, el que pide estratificar e identificar a los receptores de trasplante alogénico infectados que podrían beneficiarse de una intervención terapéutica.
Este documento está basado en la evidencia científica actualmente disponible y contempla una serie de recomendaciones para el manejo del Covid-19 en pacientes receptores de TPH alogénico (el donante comparte el mismo tipo genético que el paciente) o autólogo (el donante es el propio paciente), pacientes receptores de terapia CAR-T y pacientes con cáncer de la sangre en tratamiento quimioterápico y/o inmunosupresor.
A juicio de los expertos, es esperable que el nuevo coronavirus pueda ser particularmente severo en pacientes inmunodeprimidos y especialmente en aquellos que hayan recibido un trasplante alogénico. De hecho, actualmente se conocen los factores de riesgo de severidad y mortalidad de las infecciones por virus respiratorios de la comunidad en pacientes alotrasplantados.
Al mismo tiempo, en el trabajo se señala que es "extremadamente recomendable" el muestreo activo ante la mínima sospecha de infección respiratoria en pacientes inmunodeprimidos, pues está demostrado que disminuye significativamente la mortalidad de este grupo de población.
Con respecto a las medidas de aislamiento de pacientes oncohematológicos con COVID-19, se han recomendado aquellas proporcionadas por el Ministerio de Sanidad de cara a la atención de pacientes, la toma de muestras respiratorias y la realización de cualquier otra técnica diagnóstica requerida. Además, en el documento se aconseja que no haya cuidadores o familiares con el paciente cuando esté ingresado en el hospital y que no se permitan visitas del entorno familiar hasta que el virus haya desaparecido.
"Por su parte, todo el personal sanitario deberá hacer uso de mascarilla quirúrgica, bata verde y guantes para entrar en cualquier habitación. Por último, se recomienda el ingreso en habitaciones convencionales con presión de aire negativa. Solo en caso de necesidad, estos pacientes podrían estar en habitaciones con presión de aire positiva, siempre y cuando se disponga de una antecámara y haya disponibles equipos de protección individual", zanjan los expertos en el documento.