MADRID, 5 Nov. (EUROPA PRESS) -
La Sociedad Española de Hematología y Hemoterapia (SEHH) y la Fundación CAT, organismo de certificación de la calidad en transfusión, terapia celular y tisular de la SEHH y de la Sociedad Española de Transfusión Sanguínea (SETS), han pedido la puesta en marcha de los programas 'Patient Blood Management' (PBM) en todos los centros sanitarios y áreas de salud de España.
"Hacemos este llamamiento para optimizar la práctica transfusional, con el fin de mejorar los resultados clínicos y la seguridad de los pacientes, a la vez que reducen y ahorran recursos sanitarios. El plan de actuación de la OMS sobre acceso universal a productos sanguíneos seguros, eficaces y de calidad, remarca el PBM entre sus seis objetivos a desarrollar entre 2020 y 2023", ha señalado la vocal de SEHH y directora del Comité Técnico Asesor de la Fundación CAT, Cristina Arbona.
Entre otras demandas, la experta pide que se promueva un Plan Nacional de PBM con carácter obligatorio, "tal y como ya se ha hecho en Italia, Portugal o Reino Unido" y considera clave su inclusión en los programas formativos de pregrado y postgrado de todas las carreras sanitarias.
"Hay que hacer análisis comparativos y auditorías sobre la práctica transfusional de todos los componentes sanguíneos y de
la implantación del PBM. Habría que incluir este asunto en los
pactos de gestión y contratos programa de los centros sanitarios y servicios, así como promover la implantación de la Vía RICA (Recuperación Intensificada en Cirugía del Adulto), avalada por el Ministerio de Sanidad, a través de Guía Salud, y en la que han participado más de 40 asociaciones médicas, de enfermería y de pacientes, entre ellas la SEHH y la SETS", ha asegurado.
Por su parte, el director del Banco de Sangre y Tejidos de Navarra y representante de la SEHH en la Vía RICA, José Antonio García, la anemia, la hemorragia y la transfusión sanguínea "se asocian con peor resultado clínico". Entre sus objetivos de desarrollo sostenible para 2025, el director ha mencionado que la OMS "contempla la reducción de la anemia en la mujer en un 50%, dado que esta afección "se asocia con un mayor riesgo de hemorragia postparto y un mayor consumo de componentes sanguíneos, entre otras muchas cosas"