MADRID, 10 May. (EUROPA PRESS) -
Con motivo del Día Nacional del Niño Hospitalizado, el próximo viernes 13 de mayo, la Fundación Infantil Ronald McDonald pone el foco en la necesidad de mantener a la unidad familiar lo más libre de preocupaciones posibles durante un momento en el que su única inquietud debe ser los cuidados y la cercanía al hijo hospitalizado.
Para ello, dispone de programas que mejoran de forma directa la salud y el bienestar de los niños y sus familias a través de las Casas y Salas Familiares Ronald McDonald. Estas Casas, situadas cerca de los hospitales de referencia, alojan gratuitamente a las familias que acuden derivadas por los propios hospitales donde sus hijos reciben los tratamientos, y que deben desplazarse desde sus residencias habituales, a menudo localizadas a mucha distancia. Ello permite que dispongan de un respiro de tranquilidad para el estrés que supone tener un hijo con una enfermedad preocupante, además de un grave*deterioro*en la economía familiar, con gastos de alojamiento, transporte o comidas.
Necesidades hospitalarias desde el momento del nacimiento
Por otra parte, las Salas Familiares Ronald McDonald son un refugio dentro del hospital, que permite el paso tanto a los niños en tratamiento como a sus acompañantes. Cuando un niño está en estado crítico, los padres no quieren abandonar el hospital, y es por eso por lo que necesitan un espacio donde poder descansar y donde encuentren cierta privacidad dentro del propio hospital.
Según la presidenta de la Fundación, Blanca Moreno, "desde hace 25 años, nuestra labor se ha centrado en desarrollar programas que ayuden a las familias con hijos enfermos, siempre con el objetivo de poder aumentar el alcance para atender a más familias en sus peores momentos. En una fecha tan señalada para nosotros como el Día del Niño Hospitalizado, queremos afianzar nuestro compromiso y seguir apoyando a todas esas familias y ofreciendo un hogar fuera del hogar".