La fitoterapia, una alternativa en la menopausia que disminuye el riesgo cardiovascular y mejora la densidad ósea

Actualizado: viernes, 29 abril 2011 14:43

MADRID 29 Abr. (EUROPA PRESS) -

la fitoterapia es, según los expertos reunidos en el III Curso de Formación Continuada de Climaterio y Menopausia celebrado en Almería, una alternativa para afrontar la menopausia, ya que disminuye el riesgo cardiovascular y mejora la densidad ósea.

"Los fitoestrógenos han evidenciado mejorías en los niveles de colesterol con descensos de las lipoproteínas de baja densidad, mejorando así el perfil lipídico. Además, disminuyen los procesos tromboembólicos y mejoran la circulación, por lo que los riesgos de accidentes cerebrovasculares e infarto disminuyen en estas pacientes respecto a su situación sin tratamiento", explica el jefe del servicio de Ginecología y Obstetricia del Complejo Hospitalario de Torrecárdenas en Almería, Gabriel Fiol.

Asimismo, en el caso de la osteoporosis, este experto indica que "si bien el tratamiento hormonal sustitutivo ha demostrado mejorar la masa ósea en este periodola mayor parte de las publicaciones que aportan datos sobre el tratamiento fitoterápico evidencian resultados positivos sobe la densidad mineral ósea".

Entre los diferentes tipos de fitoestrógenos que se conocen, las isoflavonas son el tratamiento natural más empleado para prevenir las enfermedades y trastornos asociados a la menopausia. "Las isoflavonas poseen una estructura química tal que les permite actuar en los mismos lugares que algunas hormonas femeninas, supliendo en parte el papel de los estrógenos, cuya disminución durante la menopausia es la causa de la aparición de sofocos, sudoraciones, enfermedades cardiovasculares y osteoporosis", detalla Fiol.

La soja es fundamentalmente la planta de la que se obtienen estas sustancias naturales que producen una reducción significativa de los sofocos y ejercen un efecto protector sobre los problemas cardiovasculares, además de prevenir la aparición de osteoporosis.

"No obstante, para que sea efectivo debe administrarse una dosis diaria adecuada y, en este caso, para el abordaje de los síntomas climatéricos debe ser de, al menos, 80 mg de isoflavonas y 15 mg de genisteína", puntualiza el presidente de la Asociación Española para el Estudio de la Menopausia (AEEM), Rafael Sánchez Borrego.

A pesar de los beneficios demostrados los expertos recuerdan que, para garantizar la seguridad, es fundamental que la paciente consulte siempre a su ginecólogo, médico, o farmacéutico antes de utilizar una planta como si de un medicamento se tratase.

"Las plantas medicinales a pesar de su seguridad, no son inocuas. Son fármacos y, como tales, deben respetarse las indicaciones del prospecto y asegurarse de que tienen el reconocimiento del Ministerio de Sanidad", asegura Sánchez Borrego.