MADRID 17 Mar. (EUROPA PRESS) -
Ángela Río, Paloma Domingo, Irene del Olmo y Victoria Moreno, fisioterapeutas especializadas en tratamientos linfo-venosos y oncológicos desde hace más de 25 años, han creado la Asociación Española de Linfedema, con el objetivo de ayudar a prevenirla o tratarla si ya existe, fomentar su investigación y dar a conocer los tratamientos más eficaces.
Por ello, una de sus primeras acciones ha sido demandar más conocimiento de esta patología entre profesionales médicos, oncólogos y radiólogos, entre otros, para abordar el tratamiento y lograr estabilizar y normalizar la enfermedad.
"Existe un gran desconocimiento de los profesionales que están muy próximos a los pacientes oncológicos y que valoran poco o nada la posibilidad de aparición de un linfedema", ha lamentado la vicepresidenta de AEL, Paloma Domingo, para avisar de que, una vez superado el cáncer, la aparición de esta enfermedad puede cambiar la calidad de vida de los pacientes que han superado el cáncer.
Por ello, Domingo ha destacado la importancia de hacer prevención y tratar a los pacientes en las fases iniciales, cuando se puede revertir la patología. En este sentido, la experta ha recordado que la gran mayoría de linfedemas en todo el mundo son secundarios y la causa más común es la filariasis linfática, aunque en los países industrializados, los tratamientos del cáncer se erigen como la principal causa.
En cuanto al linfedema primario, afecta dos veces más a mujeres que a hombres y aparecen en las piernas cuatro veces más que en los brazos. En un 70 por ciento de los casos afecta sólo a una pierna, empezando distalmente con un aumento del volumen del pie. No obstante, también pueden afectar a ambas piernas e incluso tronco, genitales, brazos y cara.
NUEVAS VÍAS TERAPÉUTICAS PARA EL TRATAMIENTO DEL LINFEDEMA
Por su parte, la presidenta de AEL, Ángela Río, ha informado de que el tratamiento de esta patología se ha centrado en la terapia descongestiva o la terapia descongestiva compleja, la cual consta de varias técnicas, como el drenaje linfático, vendajes de comprensión, cuidados de la piel y ejercicios activos:
"Desde su descripción por el doctor Vodder en 1932, las técnicas de drenaje han evolucionado y han dejado atrás una forma estereotipada de trabajo. Existen varias escuelas con algunas diferencias en la concepción del tratamiento y la forma de realizar las maniobras, entre ellas Vodder, Földi, Leduc, Casley-Smith, Ferrandez", ha enfatizado.
A su entender, los resultados han mejorado la calidad de vida de los pacientes y estos pueden seguir avanzando gracias al Método Godoy, una variante de la Terapia Descongestiva del linfedema, que incluye maniobras de drenaje linfático manual diferentes, medidas de contención distintas y ejercicios pasivos, que hasta ahora no se empleaban en Europa, además de los activos y de los cuidados de la piel.
"Con esta terapia, se puede normalizar cualquier tipo de linfedema, alcanzando casi el aspecto del miembro sano. Un logro que se mantiene en el tiempo siempre que el paciente se comprometa a seguir con su prenda de contención y a realizar un tratamiento de mantenimiento, ejercicio y dieta equilibrada", ha zanjado.