MADRID, 5 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Federación Española de Diabetes (FEDE) ha organizado la II jornada 'El papel del agente educativo en diabetes', en la que da visibilidad a la importancia de la educación diabetológica, herramienta clave para la óptima gestión de la patología.
En la jornada se ha analizado la posición e importancia que tiene esta figura del paciente experto en la vida de las personas con diabetes, en general, y en concreto, en los mayores de 65 años, ya que este colectivo supone el 40 por ciento de las personas afectadas por la patología.
En este sentido, y según datos de la Sociedad Española de Geriatría y Gerontología (SEGG), el 50 por ciento de los ancianos con diabetes no cuenta con un diagnóstico, debido a que las distintas formas en las que se manifiesta la patología son atípicas a partir de cierta edad, lo que dificulta su detección. Por este motivo, desde FEDE recomiendan una atención especial e individualizada en el caso de personas mayores.
Este encuentro se ha enmarcado, a nivel general, en la campaña "No des la espalda a la diabetes", y a nivel específico en la que lleva por nombre 'Agente Educativo en Diabetes', un proyecto centrado en la educación diabetológica 'on line' y orientado a formar a pacientes expertos para que estos, a su vez, puedan impartir talleres formativos presenciales en las asociaciones, para mejorar la calidad de vida y la independencia de otras personas que también están diagnosticadas de diabetes.
Con esta iniciativa formativa virtual, además, se da respuesta a ese vacío educativo que existe por parte de las Administraciones Sanitarias, que no proporcionan esta formación a pesar de ser una de sus competencias. En este sentido, hay que destacar que tan sólo el 45 por ciento de los pacientes y sus familiares afirman haber recibido educación en algún momento tras su diagnóstico, aunque no de manera continuada e individualizada.
Con este evento se ha querido poner de relieve la importancia de que las personas con diabetes cuenten con una atención especializada y una educación individual y personalizada para mejorar su calidad de vida. Además, se ha resaltado cómo esta educación diabetológica supone una notable reducción en los costes para el Sistema Nacional de Salud (SNS).
En la primera mesa de la jornada se ha abordado la importancia de la educación diabetológica y otra, en la que se han desgranado más en detalle los beneficios que reporta el Curso Agente Educativo. Por lo que se refiere a la primera de ellas, se ha contado con la participación de
Al respecto, Ana Belén Torrijos, miembro de la Junta Directiva de FEDE y presidenta de la Federación de Diabetes de la Comunidad de Madrid, ha afirmado que "no debemos olvidar lo importante que es esta figura, como un referente más de adquisición y trasmisión de educación terapéutica en diabetes".
Por su parte, Ángeles Álvarez, enfermera especialista familiar y comunitaria y coordinadora nacional de Enfermería RedGDPS, ha asegurado que "es absolutamente necesario que en el marco de la ordenación del ejercicio profesional del enfermero en el ámbito de los cuidados y la educación terapéutica de las personas con diabetes, familiares y/o cuidadores, (...) se desarrollen e implementen los diplomas de acreditación básica y avanzada para mejorar el cuidado y por tanto la calidad de vida de las personas con diabetes".
En la segunda mesa, se ha contado con Ángela Lamelas, presidenta de la Asociación de Boadilla del Monte y miembro de la Federación de Diabetes de la Comunidad de Madrid; y Carlos Miranda Fdez.-Santos, responsable del Área Cardiovascular y Diabetes de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG).
Para Ángela Lamelas, la educación diabetológica está adquiriendo cada vez "más importancia en el tratamiento de la diabetes". Asimismo, y como participante del curso 'Agente Educativo en Diabetes' de este año, ha querido remarcar que el objetivo de esta formación "es educar a la gente con diabetes para poder actuar como agentes educativos con sus iguales, ya que esta enseñanza aporta a las personas que padecen esta condición capacidades para poder liderar grupos de pacientes de manera eficaz y transmitir unos conocimientos fiables".
Por su parte, Carlos Miranda Fdez.-Santos se ha centrado en cómo este tipo de formaciones benefician especialmente a colectivos concretos; en este caso a los pacientes más ancianos, por tener más dificultades formativas a la hora de poder gestionar adecuadamente su patología. En este sentido, ha destacado que "cuando una persona está informada de la importancia que tiene el buen control sobre todos los factores de riesgo y de la propia enfermedad metabólica, el pronóstico es mucho mejor, y se retrasa la aparición de las complicaciones".
