MADRID, 14 Feb. (EUROPA PRESS) -
Expertos reunidos en el encuentro 'Hot Topics en Neonatología', organizado por la Fundación Instituto para la Mejora de la Asistencia Sanitaria y avalado por la Sociedad Española de Neonatología (SENeo), han recordado que el clampaje del cordón umbilical se debe retrasar unos 60 segundos si no se necesita reanimación, existiendo un mayor beneficio en la adaptación a la vida extrauterina.
Unas ventajas que, tal y como ha comentado el jefe del Servicio de Neonatología del Hospital General Universitario Gregorio Marañón y presidente de la Sociedad Española de Neonatología, Manuel Sánchez Luna, también se han evidenciado en prematuros, en los que el clampaje tardío se asocia con menor mortalidad y menos hemorragia cerebral.
Ahora bien, el experto ha puntualizado que en el grupo de niños que requieren reanimación, las guías vigentes indican clampaje inmediato. Así, ha explicado que para este grupo de recién nacidos se podría aplicar la técnica del ordeñoexprimir la sangre del cordón al recién nacido en el momento del nacimiento, no demorando el inicio de las medidas de reanimación.
"Sin embargo, según los resultados obtenidos en un estudio multicéntrico en el que se han analizado más de 500 recién nacidos, esta práctica se asocia con un incremento de la hemorragia cerebral en los grandes prematuros. Es interesante que la comunidad neonatal conozca estos hechos porque es una técnica que en un momento dado en el recién nacido a término puede ser beneficiosa, pero en el recién nacido prematuro no debe emplearse por los riesgos que ocasiona", ha añadido el doctor Sánchez Luna.
Dicho esto, el experto ha asegurado que la reanimación neonatal con clampaje tardío del cordón es una posibilidad "muy prometedora", por lo que ha comentado la posibilidad de que los neonatólogos estén actualmente en una etapa de transición y vean cómo las futuras guías de reanimación neonatal cambian en este sentido.
SÍNDROME DE ABSTINENCIA EN LOS RECIÉN NACIDOS
Por su parte, la jefe de sección de la Unidad de Neonatología del Hospital Universitario de Valme, Eva Patricia Torres, ha explicado que el síndrome de abstinencia, que se produce cuando un recién nacido que ha estado expuesto a drogas en el útero materno deja de estar expuesto a estas sustancias tóxicas, sigue suponiendo un problema de salud importante.
"Con el enfoque actual, el manejo de estos pacientes no sólo debe centrarse en tratar los síntomas agudos, sino en un tratamiento global del recién nacido y su entorno. El haber padecido un síndrome de abstinencia neonatal puede tener implicaciones importantes en el neurodesarrollo de ese niño a lo largo de toda su infancia. Por lo tanto, requieren de un seguimiento a largo plazo por parte de múltiples especialistas: pediatras, rehabilitadores, trabajadores sociales", ha recalcado.
Asimismo, la doctora Torres ha destacado que las transfusiones son un tratamiento fundamental para los recién nacidos extremadamente prematuros, explicando que en los últimos años se ha planteado que algunos de sus efectos secundarios podrían estar mediados por una respuesta inflamatoria. "Este nuevo enfoque nos exige optimizar la terapia transfusional para elegir en qué momento y a qué tipo de paciente debemos transfundir", ha apostillado.
Sobre al sepsis neonatal ha hablado el jefe de la Unidad de Neonatos del Hospital General Universitario Santa Lucía de Cartagena, José Luis Leante, quien ha distinguido entre sepsis precoz (aquella que surge por situaciones que tiene la madre en el momento del tratamiento) y tardía (la que es dada en recién nacidos prematuros ingresados en unidades de Neonatología).
"Hoy en día, gracias a la administración de antibióticos en la madre y a la mejor vigilancia, el número de casos de sepsis precoz se ha reducido a la mitad. Sin embargo, la sepsis tardía afecta aproximadamente a un 20 por ciento de los recién nacidos muy prematuros, es decir, a 1 de cada 5. Las consecuencias pueden ser devastadoras. Entre un 15 por ciento y un 30 por ciento fallece, y los que no, pueden quedar con secuelas invalidantes, como lesiones neurológicas o parálisis cerebral", ha dicho.
Finalmente, la neonatóloga del Hospital de Basurto, Lorena Rodeño, ha realizado una revisión del uso de la analgesia en recién nacidos para procedimientos en las unidades de cuidados intensivos. Además, ha abordado un problema complejo como es definir la causa de fallecimiento de los recién nacidos que participan en ensayos clínicos y que, debido a sus características de gran inmadurez, en ocasiones "no se puede determinar correctamente".