MADRID 11 Mar. (EUROPA PRESS) -
Más de cien profesionales sanitarios expertos en asma grave han destacado la necesidad de mejorar la gestión de la enfermedad en España, lo que repercutiría en una detección y tratamiento más tempranos de esta patología que afecta a las vías respiratorias.
Los profesionales, que forman parte del Proyecto FARO, una iniciativa colaborativa de AstraZeneca y la Universidad de Deusto, se han reunido con el objetivo de definir una serie de recomendaciones para un nuevo paradigma del abordaje del asma grave.
El fin de la 'Reunión Nacional Faro' es realizar un análisis estratégico del manejo del asma grave de España para identificar las claves del cambio de paradigma en el abordaje de esta enfermedad, estableciendo los principales retos y aproximando soluciones innovadoras y de fácil aplicación.
"Desde AstraZeneca, en línea con nuestro compromiso de mejorar la vida de los pacientes con enfermedades respiratorias, no dejamos de innovar e impulsar iniciativas como esta, que aportan una solución real al problema actual al que se enfrenta nuestro sistema sanitario en el abordaje del asma grave. Los numerosos ingresos hospitalarios, las importantes tasas de infradiagnóstico y la prevalencia de las enfermedades respiratorias, son solo una muestra de los datos que nos preocupan y que nos impulsan a colaborar estrechamente con los profesionales sanitarios para aplicar mejoras reales en el abordaje del asma grave", ha señalado la directora Médica y de Asuntos Regulatorios de AstraZeneca España, Ana Pérez.
Por su parte, Patricia Arratibel, directora del área health de Deusto Business School, ha añadido que "en el sector de la salud las tendencias en organización y las nuevas tecnologías se han acelerado exponencialmente. En este contexto tan dinámico necesitamos tomar perspectiva y tener espacios para reflexionar estratégicamente. Esta iniciativa es, precisamente, un ejemplo de ese espacio de reflexión, generación de conexiones entre profesionales y adquisición de conocimientos. Todo ello con la intención de ayudar a acelerar cambios e introducir innovaciones, en la gestión y organización con pacientes, que tienen asma grave".
Actualmente, el asma supone una carga socioeconómica en España, representando 1.500 millones de euros anuales para el Sistema Nacional de Salud (SNS). Por ello, los expertos del proyecto FARO consideran que la implementación de mejores circuitos de derivación de pacientes a los que atender en las unidades de asma grave mal controlada, supondría un alivio significativo para nuestro sistema sanitario.
En este sentido, la jefa de servicio de neumología y responsable de la unidad de asma de alta complejidad del Hospital Dr. Peset de Valencia, Eva Martínez Moragon, ha apuntado que "las unidades de asma son costo-eficientes. En ellas se estudian todas las comorbilidades y se fenotipa el asma para ajustar el tratamiento personalizado más adecuado para el paciente, se prescriben fármacos innovadores y se desarrollan nuevos protocolos de manejo y ensayos clínicos de esta enfermedad. Por ello, concentrar los recursos en estas unidades, facilitaría diagnósticos más precisos y rápidos".
EL USO DE NUEVAS TECNOLOGÍAS PARA MEJORAR LA COMUNICACIÓN
En el marco de esta reunión se ha hecho especial hincapié en los beneficios del uso de nuevas tecnologías y herramientas innovadoras en el abordaje del asma grave, como las intervenciones personalizadas a través de la inteligencia artificial, la monitorización en remoto y tiempo real, y las plataformas de telemedicina, que ofrecen una comunicación mejorada entre pacientes y profesionales sanitarios.
De acuerdo con los profesionales allí reunidos, estas soluciones pueden mejorar la eficacia del tratamiento, la experiencia del paciente, y la eficiencia del cuidado de salud.
Así, el jefe del Servicio de Alergia del Hospital Universitario La Paz de Madrid, Santiago Quirce, ha afirmado que "estas herramientas aportan importantes beneficios, tanto para los pacientes con asma grave como para los especialistas, incluyendo mejoras en la precisión diagnóstica, monitorización remota y en tiempo real, adherencia al tratamiento, intervenciones personalizadas, educación y empoderamiento del paciente, comunicación mejorada y reducción de cargas económicas y de tiempo".