MADRID 28 Abr. (EUROPA PRESS) -
Expertos reunidos en la 'I Jornada de Bioética', organizada en el Hospital HM Universitario Sanchinarro de Madrid, han destacado el valor que tiene la ética en el entorno sociosanitario ya que es un factor "importante" para la sostenibilidad del sistema sanitario.
"Hay que referir la bioética a lo que le da el sentido, que es el paciente, y hay que sacarla de los debates doctrinales, porque ahí no está todo. La mala utilización de recursos sanitarios, ya sean humanos, económicos o técnicos por parte de los profesionales, va en contra de la ética. Además, el uso inadecuado que hagan los pacientes del sistema sanitario, también merece el reproche social", ha aseverado el miembro de la Comisión Permanente del Consejo Asesor de Sanidad y vicepresidente de la Asociación Española de Derecho Sanitario, Julio Sánchez Fierro.
Asimismo, el experto ha informado de que hay otro enfoque dentro de la bioética, el cual se refiere a las exigencias derivadas del cambio del paradigma del sistema sanitario basado en la cronicidad y en el envejecimiento poblacional. Por ello, ha asegurado que el trabajo en equipo es una herramienta en favor del sistema y de los pacientes.
Por su parte, el director del 'Máster de Bioética' en la Universidad Complutense de Madrid, Diego Gracia Guillén, ha recordado que los valores son lo "más importante" que tienen las personas y ha aseverado que la bioética tiene como objetivo "incrementar" la calidad de la toma de decisiones de los profesionales sanitarios mediante el manejo "correcto" de los valores y de los "conflictos de valor".
El coordinador de la Unidad de Paliativos Pediátricos del Hospital Niño Jesús, Ricardo Martino Alba, ha relacionado la bioética al paciente pediátrico. En este sentido, ha explicado que el niño tiene su propia dignidad y no depende de la valoración cuantitativa de atributos o capacidades.
"Además, la dependencia para las necesidades básicas y las limitaciones en la comprensión o la comunicación no pueden ser condiciones para una vida digna. Tiene que conservar la propia identidad, mantener autonomía en las decisiones, disponer de una situación higiénica y social aceptable y disfrutar de las relaciones personales importantes para uno mismo. Es decir, tiene que estar consciente, limpio, acompañado y sin dolor", ha apostillado.
Del mismo modo, el pediatra y jefe de la Unidad de Genética Médica de HM Hospitales, Pablo Lapunzina Badía, ha subrayado la necesidad de que el paciente sea "siempre" informado sobre los hallazgos genéticos considerados de utilidad en relación con el trastorno genético que indicó el estudio anterior, así como de los hallazgos genéticos con implicación clínica relevante y de alteraciones genéticas asociadas a un riesgo de desarrollar determinadas enfermedades en un futuro, prevenibles y tratables, como el cáncer de mama.
LA COMUNICACIÓN ENTRE EL MÉDICO Y EL PACIENTE
El médico y máster en Bioética y cardiólogo en HM Universitario Sanchinarro y en el Hospital de la Princesa de Madrid, Manuel de los Reyes López, ha resaltado los derechos del paciente a la información, a la verdad, a la intimidad y a la confidencialidad y a la libertad de elección, así como al derecho a morir con dignidad y en paz.
De hecho, ha recomendado que, a la hora de comunicar el diagnóstico al paciente, se tenga en cuenta el equilibrio psicológico y emocional del paciente, la gravedad de su enfermedad, su capacidad de comprensión, su fragilidad, el tipo de tratamiento existente y su grado de dependencia y apoyo.
También, ha destacado la importancia del consentimiento informado y ha insistido en que éste debe ser reduccionista (limitado a los formularios escritos, restringido a la esfera legal y ceñido al ámbito médico) e integrador (con la responsabilidad ética y legal del médico, el papel de la enfermería en el equipo).
Finalmente, la profesora de Bioética y Antropología de la Universidad CEU San Pablo, Elena Postigo Solana, ha hecho referencia a las pastillas de la personalidad, la criogenización para volver a la vida, la clonación, la manipulación genética y los microchips, unos avances que permiten diseñar la naturaleza humana y mejorarla.