MADRID 8 Oct. (EUROPA PRESS) -
El catedrático de Farmacología de la Facultad de Medicina de la Universidad de Valencia y farmacólogo clínico del Hospital Universitario Dr. Peset de Valencia, Juan Vicente Esplugues, ha pedido tener una "gran cautela" en la introducción de los biosimilares, ya que puede provocar toxidades, y ha recordado que la seguridad del paciente "es lo primero".
"Los biomarcadores deben probar tener la misma eficacia y seguridad que las moléculas originales de los tratamientos biológicos, ya que podemos encontrarnos con fenómenos de toxicidad totalmente nuevos", ha comentado el experto, durante la XXIII Reunión Nacional del Grupo Español de Trabajo en Enfermedad de Crohn y Colitis Ulcerosa (GETECCU).
Allí, ha recordado que los biomarcadores "no son medicamentos genéricos, sino que son copias de fármacos biotecnológicos producidos utilizando nuevas líneas celulares, nuevos procesos y nuevos métodos analíticos".
Se trata, por tanto, de una clase nueva en la que no hay "demasiada experiencia" y que requiere de pruebas científicas "mucho más exigentes" para su autorización que la exigida para un medicamento genérico, a través de ensayos clínicos comparativos directos en pacientes y con una farmacovigilancia específica.
En este sentido, Esplugues ha asegurado que los biosimilares no implican "ninguna ventaja" frente al original biológico, "más allá de su precio", y ha señalado que buscar la "misma sanidad a un precio más barato" constituye un "objetivo loable" aunque, ha apostillado, "conseguir una rebaja a costa de un mayor nivel de riesgo en seguridad conlleva a ser más cautelosos con estos productos".
En relación a la paulatina introducción de los biosimilares y la cautela que precisan, el doctor Esplugues ha comentado que actualmente los biosimilares que han aparecido a nivel nacional, como las EPOs, tienen una cuota de mercado "muy baja" (1%), dado que a igualdad de producto el médico siempre prefiere "el fármaco original".