MADRID, 7 May. (EUROPA PRESS) -
Expertos Asociación de Microbiología y Salud (AMYS) han alertado, tras conocerse el caso de un paciente del Reino Unido con la peor 'supergonorrea' detectada en el mundo como consecuencia de ser resistente a todos los antibióticos, sobre los riesgos de la aparición de multirresistencias en las infecciones de transmisión sexual.
En concreto, 'neisseria gonorrhoeae', también llamada habitualmente gonococo, es la bacteria responsable de una de las infecciones de trasmisión sexual más extendidas en todo el planeta, como es el caso de la gonorrea, una enfermedad que la Organización Mundial de la Salud (OMS) estima que afecta a cerca de 80 millones de personas, especialmente en el grupo entre 15 a 50 años.
"El caso del paciente del Reino Unido demuestra no solo el gran impacto de esta bacteria, trasmitida sexualmente, sino además su gran capacidad de adaptarse a cualquier tipo de condición antibiótica, provocando la aparición de la multirresistencia que complica las opciones del tratamiento", ha dicho el presidente de Amys, Ramón Cisterna.
BACTERIAS INFORMAN A OTRAS A SER RESISTENTES
A su juicio, el origen de la multirresistencia en 'neisseria gonorrhoeae' no solo es propiciada por su "gran adaptabilidad" a medios hostiles como son los antibióticos, sino que además puede recibir información de otras bacterias para enseñarle cómo hacerse resistente.
"La transmisibilidad de la resistencia es un hecho entre distintos tipos de bacterias como son otras 'neisserias' que por ejemplo habitan normalmente en el tracto orofaringeo", ha añadido el experto, tras recordar que en julio de 2017, la OMS ya advirtió de la resistencia cada vez mayor de la gonorrea a los antibióticos de primera línea que alcanzaban porcentajes del 97 por ciento en el caso de ciprofloxacino, 81 por ciento en azitromicina y 66 por ciento en cefixima o ceftriaxona.
De hecho, según ha explicado el doctor Cisterna, numerosos antibióticos se han mostrado en un inicio eficaces contra esta bacteria pero han ido perdiendo actividad con el paso del tiempo. "Hace algunos años se apreciaba una necesidad de mayor cantidad de antibiótico para acabar con la bacteria hasta que aparecieron los primeros casos de resistencias a azitromicina o ceftriaxona", ha enfatizado.
El paciente con el peor caso de gonorrea informado hasta el momento ha logrado curarse finalmente gracias a ertapenem, un antibiótico utilizado exclusivamente en el hospital para infecciones muy graves, pero recientemente han aparecido otros dos casos en Australia a los que todavía no se han encontrado antimicrobianos eficaces.
Finalmente, ha asegurado que la contribución de los expertos en Microbiología Clínica es básica en el diagnóstico y las posibilidades de tratamiento, un aspecto "esencial" si se tiene en cuenta los múltiples efectos sobre el organismo de estas enfermedades que van desde la faringitis o la clásica uretritis supurativa a cuadros de afectación más importantes en el caso de la mujer que puede sufrir la enfermedad pélvica inflamatoria, responsable de una de las causas de infertilidad más frecuentes de origen infeccioso.