MADRID, 19 Oct. (EUROPA PRESS) -
El doctor Álvaro Castellanos, vicepresidente de la Sociedad Española de Medicina Intensiva, Crítica y Unidades Coronarias (SEMICYUC) y jefe de Medicina Intensiva del Hospital Universitario La Fe (Valencia), ha resaltado que el gran reto es "crear una gran red de investigación entre todos los servicios de Medicina Intensiva".
El próximo lunes 26 de octubre arranca el LV Congreso Nacional de la SEMICYUC. Será la primera vez que se realice en formato digital y, también, la primera en la que se desarrolle durante cinco jornadas de ponencias, seminarios o presentaciones, la última de ellas dedicada de forma monográfica al COVID-19 y el papel de la especialidad frente a la pandemia. El lema de este año es 'Hacia la Medicina Intensiva del futuro: ampliando horizontes'.
"La investigación en el campo de la infección ha sido tradicionalmente muy activa entre los intensivistas, porque es algo que tratamos con frecuencia, tanto la infección comunitaria como la adquirida dentro de la UCI. Concretamente la investigación sobre COVID-19 en Medicina Intensiva se está enfocando desde diferentes ópticas: investigación básica, trabajos originales y observacionales, estudios en red y ensayos clínicos para probar nuevos agentes antivíricos específicos para esta infección, como pueden ser el remdesivir o los agentes biológicos para modular la respuesta inflamatoria generada por el virus, algunos de los cuales, aun están en fase de experimentación en ensayos clínicos aleatorios y ciegos", señala el doctor.
La primera ola de la pandemia llevó a los servicios de Medicina Intensiva a una intensa colaboración entre centros de toda España, un esfuerzo científico en común que debería mantenerse. "Uno de los retos pendientes en I+D es la creación de una plataforma que facilite el trabajo de investigación en red entre todas las Unidades de Cuidados Intensivos de España. Ahora mismo, la investigación está muy atomizada y tener esta plataforma nos daría un potencial enorme. Nos permitiría publicar muchos estudios en relación con tratamientos nuevos o la influencia en la calidad asistencial de nuevas técnicas, protocolos, etcétera", prosigue Castellanos.
La importancia de la formación continua será uno de los bloques clave durante el Congreso Nacional de la SEMICYUC. "En Medicina Intensiva, la formación es esencial. Tratamos pacientes muy complejos y usamos una tecnología muy avanzada, lo que requiere un entrenamiento constante y una formación continua. En nuestro campo hay evidencias científicas muy novedosas periódicamente y solo mediante la formación podemos trasladar todo este conocimiento a la práctica clínica, de ahí que haya que potenciarla mucho", explica.
"Actualmente estamos cambiando nuestro modelo de formación tradicional, basado en rotaciones por servicios clínicos diversos, hacia uno nuevo que, conservando la experiencia clínica de las rotaciones, es más garantista, estructurado, transparente, objetivo y muy orientado al resultado. Se trata de un modelo de formación médica basado en la adquisición de competencias claramente definidas y cuyos pilares básicos son la evaluación formativa y la retroalimentación del tutor", concluye el doctor Castellanos.