MADRID 9 Oct. (EUROPA PRESS) -
El psiquiatra del Instituto de Psiquiatría y Salud Mental del Hospital Gregorio Marañón de Madrid y presidente de la Fundación Patología Dual, el doctor Néstor Szerman, afirma que "no es posible tratar la salud mental sin considerar la patología dual" y lamenta que "la total ignorancia" que las estrategias de salud mental hacen de la patología dual "agrava el síndrome de la puerta equivocada y aumenta la morbimortalidad de los pacientes".
La patología dual -la existencia de adicciones y otros trastornos mentales- constituye un problema sanitario y social debido a sus altas tasas de prevalencia. Actualmente, se estima que más del 50 por ciento de los pacientes de la red de salud mental presentan también una adicción, cifra que aumenta al 75 por ciento en los trastornos mentales graves; mientras que la totalidad de los pacientes en la red asistencial de adicciones presenta además otro trastorno mental.
Según apunta Szerman, la tradición histórica de la salud mental ha considerado las adicciones como un problema de conducta o una elección personal, una perspectiva en la que han ahondado las corrientes con mayor peso actualmente en el ámbito psico-social. Esto, añade el psiquiatra, ha provocado que la patología dual sea "el patito feo" de la salud mental y que al tratar esta patología "prevalezcan los prejuicios y no los conocimientos científicos, que indican de forma muy clara que, igual que nadie elige tener psicosis, nadie elige tampoco tener una adicción y, por tanto, patología dual".
El experto destaca que estos pacientes son doblemente estigmatizados, por un lado, por la sociedad y, por otro, por el sistema público de salud, "lo que es aún más grave", ya que dirige a estas personas a redes sanitarias que muchas veces focalizan la adicción como un problema de conducta.
"Esto constituye una discriminación, ya que muchos pacientes son diagnosticados como consumidores de "toxicos" en lugar de como consumidores de sustancias psicoactivas que, muchas veces por ensayo y error, ellos mismos han encontrado para aliviar su sufrimiento emocional y cognitivo, aunque esto desgraciadamente les conduzca a un nuevo y más grave problema", agrega.
Para Szerman, dado que las evidencias científicas muestran que la patología dual "es la norma", la exclusión de las adicciones del Sistema Nacional de Salud supone en la práctica que los pacientes con patología dual son "claramente discriminados" en su derecho al acceso a los servicios sanitarios.
Al respecto, recuerda que el hecho de que en España los pacientes con patología dual dispongan de dos puertas de acceso al tratamiento (salud mental y adicciones) se convierte muchas veces en una "barrera real" para acceder a los servicios sanitarios. Esto es lo que se conoce como el síndrome de la puerta equivocada.
"La inmensa mayoría de las personas entran por una u otra puerta sin recibir en ningún momento un abordaje integrado e integral de sus patologías, que sería el primer paso para poder adaptar el acceso, el diagnóstico y el tratamiento a una forma personalizada", concluye Szerman.