MADRID 21 Oct. (EUROPA PRESS) -
Una investigación en pacientes con apnea obstructiva del sueño (AOS) del Hospital Universitari Arnau de Vilanova (Lérida) ha revelado que el uso de las máquinas de presión positiva continua en las vías respiratorias (CPAP, por sus siglas en inglés) de forma constante puede prevenir el desarrollo de hipertensión arterial.
El trabajo, publicado en 'European Respiratory Journal', ha mostrado un efecto protector de estos dispositivos tras analizar a 60 voluntarios diagnosticados de apnea del sueño grave, con una media de edad de 52 años y presión arterial normal. Los pacientes fueron seguidos durante tres meses, en los que algunos recibieron tratamiento con CPAP y otros la atención habitual.
Según los resultados, aquellos que no utilizaron el dispositivo vieron aumentada de forma significativa su presión arterial. En cambio, los que emplearon la CPAP durante cuatro o más horas cada noche se vieron protegidos de este incremento de la tensión arterial.
El estudio detalla que, mientras que los sujetos que recibieron la atención habitual experimentaron un aumento significativo de los parámetros del monitoreo ambulatorio de presión arterial (MAPA) de 24 horas durante el período de seguimiento de tres meses, quienes recibieron tratamiento con CPAP no mostraron cambios ni reducciones durante este tiempo.
A este respecto, los autores han puntualizado que la consecución de estos efectos parece depender de la adherencia al tratamiento, ya que los pacientes con una adherencia insuficiente a la CPAP experimentaron aumentos de la presión arterial comparables a los del grupo de atención habitual.
VÍA PARA MEJORAR LA CALIDAD DE VIDA DE LOS PACIENTES
"Este nuevo estudio revela una vía para mejorar la salud y la calidad de vida de los pacientes que sufren AOS. Asimismo, muestra cómo la implicación del paciente y su compromiso con su propia salud son fundamentales para tratar la AOS y prevenir otras secuelas, como la hipertensión arterial, que puede derivar en eventos cardíacos graves", ha resaltado el neumólogo Ferrán Barbé, miembro de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) y miembro investigador del trabajo.
El neumólogo y miembro del Grupo Coordinador del Año SEPAR 2025/26 de los Trastornos Respiratorios del Sueño, Eusebi Chiner, ha señalado que la mitad de los pacientes con apnea del sueño son hipertensos y el 40 por ciento de los hipertensos roncadores padecen a su vez AOS.
Sobre esta patología, Chiner ha detallado que la falta de descanso nocturno como consecuencia de la misma provoca somnolencia diurna, lo que aumenta la probabilidad de sufrir o provocar accidentes de tráfico o laborales. Asimismo, ha aludido a la relación demostrada entre la apnea del sueño y patologías como hipertensión, insuficiencia cardiaca, ictus, cardiopatía isquémica y cáncer.
El especialista ha indicado que la AOS representa la mitad de las consultas de neumología en España y su diagnóstico aumenta entre un ocho y un 10 por ciento cada año. Entre sus consecuencias, causa la disminución de la saturación de oxígeno, cambios en la presión intratorácica y microdespertares, los cuales derivan en somnolencia diurna, trastornos cognitivos conductuales, trastornos respiratorios, cardiovasculares, metabólicos o inflamatorios.
A pesar del impacto de la apnea obstructiva del sueño en la calidad de vida de los pacientes, Eusebi Chiner ha advertido que se trata de una patología infradiagnosticada.