VALLADOLID, 7 May. (EUROPA PRESS) -
La Universidad de Valladolid (UVa) ha evaluado el proceso postoperatorio de una de las técnicas más efectivas de la actualidad, un tipo de cirugía de mini 'bypass' gástrico, a través de un estudio científico publicado recientemente.
La Facultad de Enfermería y miembros del Centro de Investigación en Endocrinología y Nutrición Clínica de la UVA (IENVA) realizaron un seguimiento de 100 pacientes sometidos a cirugía de mini bypass gástrico / bypass gástrico de única anastomosis en una clínica vallisoletana, según ha informado la Institución académica a través de un comunicado remitido a Europa Press.
El equipo investigador ha resalta la efectividad "en el tratamiento de la obesidad, con un periodo de estancia hospitalaria", según indica en un trabajo publicado en 'Scientific Reports', revista científica del grupo 'Nature'.
"Se ha realizado una recogida de datos muy sistemática a los tres, seis, nueve, doce, dieciocho y veinticuatro meses. No existen habitualmente series tan largas en la literatura científica de este tipo de intervenciones, lo que nos da una perspectiva muy completa del periodo de recuperación de las personas sometidas a este tipo de cirugías", ha señalado una de las corresponsables del estudio, la doctora María José Castro, de la Facultad de Enfermería de la UVa.
La cirugía bariátrica es empleada para casos extremos de personas con obesidad mórbida, ya que, a pesar del progreso en las técnicas, aún conlleva algunos riesgos para los pacientes. La técnica empleada emplea anestesia general y laparoscopia, que permite la visión de la cavidad pélvica-abdominal con la ayuda de una lente óptica. El bypass gástrico es un tipo de derivación que permite reducir el espacio útil del estómago, y por tanto, reducir la asimilación de alimentos por el organismo al estar saciado antes.
El estudio, que forma parte de la tesis doctoral de José María Jiménez, resaltó que la "pérdida de peso inducida fue mayor que con otras técnicas bariátricas". Un total de 71 mujeres y 29 hombres fueron incluidos en el trabajo de investigación, con un rango de edad entre los 13 y los 65 años y un peso entre 75 y 176 kilos. Los pacientes tenían un índice de masa corporal de entre 30 y 59. Se considera obesidad a partir de 30 y obesidad mórbida a partir de 50.
Concretamente, el equipo investigador observó un mayor porcentaje de índice de peso corporal perdido conforme pasaba el tiempo tras la intervención. "Nos indica que existe una mayor adhesión a nuevos hábitos alimentarios más saludables en el periodo postquirúrgico", explica Castro.
María José Castro ahonda en la necesidad de prevenir, a través de hábitos de alimentación saludables, la obesidad. Incide en la prevención en edades infantiles o adolescentes. "Un niño obeso tiene un 25 por ciento más de posibilidades de convertirse en un adolescente obeso, y un obeso adolescente, un 70 por ciento de alcanzar esta circunstancia cuando sea adulto".
Por ello, el momento crítico para la adopción de hábitos alimentarios saludables "es la infancia", de modo que considera que los lugares de actuación para motivar la adquisición de estos hábitos es el entorno escolar.