Especialistas recomiendan la vacuna conjugada trecevalente para prevenir la enfermedad neumocócica en niños y adultos

Actualizado: viernes, 11 enero 2013 15:55

MADRID, 11 Ene. (EUROPA PRESS) -

La vacuna antineumocócica conjugada trecevalente es altamente efectiva para prevenir la enfermedad neumocócica en niños y adultos, según han asegurado diferentes expertos durante la conferencia 'Prevención de la enfermedad neumocócica del niño al adulto', celebrada en el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid (COFM).

Esta reunión ha servido también como punto de encuentro para actualizar los conocimientos que ya tiene el farmacéutico sobre vacunación. En esta línea, la vicesecretaria del COFM, Ana María Quintas, ha avisado de que la retirada de la vacuna antineumocócica del calendario de vacunación infantil de la Comunidad de Madrid supondrá un "peso mucho más específico" del farmacéutico, dado que son ellos los que pueden recordarlo y recomendar la vacunación a los pacientes candidatos.

"Son muchas las madres que consultan en la farmacia si es necesario poner la vacuna, ya que su pediatra se la ha recomendado. Por lo tanto, nuestro papel como farmacéuticos es dar consejos sobre la conservación de la vacuna, la dosificación, los intervalos de vacunación y la importancia de que se administren todas las dosis", ha recalcado Quintas.

La enfermedad neumocócica invasiva (ENI) causada por el 'Streptococcus pneumoniae' (también conocido como neumococo) constituye un importante problema de salud pública debido a su morbilidad y mortalidad, principalmente en los primeros años de vida, en adultos a partir de los 50 años y en pacientes con enfermedades crónicas o inmunodepresoras.

El neumococo sigue siendo el patógeno bacteriano más grave, ya que provoca enfermedades invasivas y potencialmente mortales como la meningitis, neumonía bacteriémica, bacteriemia sin foco y sepsis y otras infecciones no invasivas, como es el caso de la neumonía, la otitis media aguda y la sinusitis.

Además, la jefe del Servicio de Pediatría del Hospital General Universitario Gregorio Marañón y miembro del Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría, Teresa Hernández-Sampelayo, ha recordado que entre las poblaciones de riesgo, se encuentran los adultos en situaciones de inmunodepresión con tumores, tratamientos quimioterápicos, inmunosupresores biológicos, asplenia, leucemias, enfermedad de Hodgkin, síndrome nefrótico, trasplantes de órganos sólidos e infección por VIH.

HAY PERSONAS QUE NECESITAN VACUNARSE Y NO LO HACEN

En esta línea, Quintas ha asegurado que existen personas con problemas respiratorios o inmunodeprimidos que están cubiertos con la vacuna, pero hay personas en riesgo que no pertenecen a estos colectivos, pero que necesitan vacunarse, por ello, los farmacéuticos, médicos y enfermeros deben darles la información que necesitan para que cumplan con la vacunación.

En el caso de los niños, la doctora Hernández-Sampelayo ha explicado que el "mayor riesgo" de adquirir enfermedad neumocócica es no estar vacunado, aunque, ha puntualizado, siempre estarán en "mayor riesgo" los niños inmunodeprimidos por cualquiera de las causas que producen alteraciones del sistema inmunológico, ya sean congénitas o adquiridas.

También tienen riesgo los niños con alteraciones del bazo, niños con fistulas de líquido cefalorraquídeo, implantes cocleares y enfermedades cardiacas, renales o pulmonares crónicas.

Asimismo, durante la reunión se ha destacado la amplia cobertura de protección que ofrece la vacuna antineumocócica conjugada trecevalente para prevenir la enfermedad neumocócica invasiva desde las 6 semanas de vida hasta los 5 años de edad en niños y en adultos de 50 o más años.

En esta línea y, teniendo en cuenta que los niños son los principales propagadores de la infección, la doctora Hernández-Sampelayo ha recalcado que desde su utilización en la Comunidad de Madrid, como parte del calendario infantil entre los años 2007 y 2012, se ha conseguido un descenso significativo del número de casos de niños con enfermedad neumocócica grave, altas coberturas e inmunidad de grupo, de forma que la población vacunada ha protegido indirectamente a los niños que no estaban inmunizados.

"El reto ahora es mantener estos logros alcanzados, aunque en el momento actual sean los padres los que tengan que financiar la vacunación antineumocócica de los niños, al igual que los adultos deban hacerlo con su propia vacunación", ha zanjado.