Especialistas en patologías infecciosas recomiendan usar antibióticos para reducir las muertes por sepsis graves

Actualizado: lunes, 29 abril 2013 20:32

MADRID, 29 Abr. (EUROPA PRESS) -

Especialistas en enfermedades infecciosas han defendido el uso precoz de antibióticos de gran actividad bactericida para reducir el número de fallecimientos causados por la sepsis grave.

Los expertos se han pronunciado así durante la sesión científica titulada 'Afrontando el dilema de la mortalidad y resistencia en infecciones grampositivas' organizada por Novartis en el marco del XXIII Congreso Europeo de la Sociedad Europea de Enfermedades Infecciosas y Microbiología (ESCMID).

Esta enfermedad, que suele confundirse con un 'envenenamiento de la sangre', es una de las principales causas de mortalidad en el mundo, algo que, según los especialistas, se podría reducir considerablemente con el "uso de medicamentos activos contra Gram+ desde la Hora 0 en la que se activa el código sepsis".

En concreto, la sepsis o septicemia es la respuesta del organismo a una infección, ya sea extra o intrahospitalaria, algo más frecuente debido al estado inmunológico de los pacientes y al aumento de técnicas invasivas, catéteres endovenosos, prótesis e injertos intravasculares. Su incidencia aumenta un 2 por ciento anualmente y se registran 18 millones de casos al año en todo el mundo.

De hecho, sólo en España se detectan diariamente entre uno y dos nuevos casos de sepsis grave por cada 100.000 habitantes. Además, tiene una mortalidad, del 50 por ciento en caso de choque séptico, siendo superior a la del cáncer de próstata, el cáncer de mama y el VIH/SIDA juntos.

Por ello, y con el objetivo de reducir estas cifras, el doctor de la Unidad de Enfermedades Infecciosas del Hospital Clínic de Barcelona, Alex Soriano, ha defendido la importancia de una antibioticoterapia precoz en el tratamiento de las infecciones graves para reducir su mortalidad, el tiempo de ingreso y posibles recaídas.

Y es que, aunque se trata de un protocolo cada vez más frecuente, la tendencia habitual y clásica es empezar por un antibiótico menos potente y aumentarlo si es necesario. "El consumo de antibióticos se ha relacionado con la selección de microorganismos resistentes, pero el problema no es que uses un antibiótico muy fuerte desde el principio, sino que el paciente lo tome durante muchos días sin que sea necesario. El inicio del tratamiento no debería demorarse innecesariamente e interrumpirse o ajustarse de acuerdo con los resultados del laboratorio de Microbiología", ha explicado el experto.

A su juicio, ante la sospecha de sepsis grave es mejor no asumir riesgos, ya que está en peligro la vida del paciente. "Es verdad que siguiendo este protocolo es posible que personas que no necesitan un tratamiento tan fuerte acaben recibiéndolo pero ello no supone un riesgo para el paciente", ha apostillado el doctor.