MADRID, 3 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), dependiente del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, ha recibido 269 notificaciones de incidentes relacionados con las prótesis mamarias de la empresa francesa Poly Implant Prothese (PIP), y ya se ha procedido a la retirada de 391 de estos productos, de los cuales un 70 por ciento (275) presentaban algún tipo de rotura.
Hasta el momento, según informa este organismo, todas las comunidades autónomas han facilitado la práctica totalidad de sus datos y se estima que el número de mujeres portadoras de prótesis PIP en España es de 18.500, habiéndose implantado unas 37.000 prótesis.
De todas ellas, únicamente un 4,2 por ciento fueron implantadas en centros sanitarios del Sistema Nacional de Salud (SNS), donde actualmente están siendo "atendidas debidamente" para hacer un seguimiento de todos los implantes.
Para las mujeres que han sido atendidas en centros privados y a las que no les ha sido posible acudir a la clínica privada donde fueron intervenidas para una consulta médica, las comunidades autónomas han facilitado una relación de centros de referencia a los que puedan acudir las mujeres que no reciban la atención adecuada en el centro en el que le efectuaron la implantación.
Además, y pese al dictamen emitido por el Comité Científico de Riesgos para la Salud Emergentes y Nuevamente Identificados (SCENIHR) de la Comisión Europea, que constata la ausencia de asociación de las prótesis mamarias con cáncer y la falta de evidencia de riesgos sanitarios superiores al de otras prótesis mamarias, la AEMPS mantiene su recomendación a todas las personas con implantes mamarios que comprueben su etiquetado y, en caso de ser de PIP, contacten con su cirujano para someterse a una revisión y comprobar el estado de las mismas.
Este seguimiento, según recuerdan, debe incluir un control ecográfico y en caso de obtenerse una información no concluyente debe realizarse una resonancia magnética.
En el caso en que se detecte o sospeche la rotura de las prótesis, debe procederse a su retirada. En ausencia de sintomatología clínica o deterioro de la prótesis, la decisión de explantación se tomará de forma individualizada, conjuntamente con el cirujano, atendiendo a la mejor decisión terapéutica en función de las circunstancias médicas y estéticas particulares de cada persona.
Por otro lado, advierten de que, si no se efectúa la retirada de las prótesis, deberá efectuarse un seguimiento clínico y radiológico cada 6 meses.
La AEMPS recuerda que las reclamaciones que eventualmente puedan presentar las perjudicadas por los posibles daños causados como consecuencia de la implantación de las prótesis deberían ir dirigidas a la empresa fabricante francesa Poly Implant, por ser responsable del fraude, al haber modificado de forma deliberada las especificaciones declaradas en el expediente presentado para obtener la certificación CE, o, en su caso, a su liquidador, al encontrase la misma en quiebra.
También, añade, les asiste a las perjudicadas el derecho a personarse en los procedimientos judiciales que se están sustanciando en territorio francés, donde ya se han iniciado actuaciones judiciales al efecto. Igualmente, podrán dirigirse a los tribunales españoles competentes para el reconocimiento del daño.