Endocrinos urgen a mejorar el diagnóstico precoz de la disfagia para evitar desnutrición o neumonía aspirativa

Archivo - Hombre con dificultad para tragar y comer.
Archivo - Hombre con dificultad para tragar y comer. - ISTOCK - Archivo
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Publicado: jueves, 11 diciembre 2025 14:38

MADRID 11 Dic. (EUROPA PRESS) -

La Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición (SEEN) ha urgido este jueves a mejorar el diagnóstico precoz de la disfagia para evitar consecuencias graves, como desnutrición, deshidratación o neumonía aspirativa, siendo esta última la complicación más temida de la disfagia, ya que puede tener una mortalidad asociada del 50 por ciento.

La sociedad científica ha recordado con motivo del Día Mundial de la Disfagia, que se celebra este viernes, que esta consiste en la dificultad para trasladar el alimento desde la boca hasta el estómago. Su origen puede ser neurológico, estructural o muscular, y es habitual en pacientes con ictus, enfermedades neurodegenerativas como Parkinson o esclerosis lateral amiotrófica (ELA), y personas intervenidas por tumores de cabeza y cuello.

En torno al ocho por ciento de la población mundial sufre esta afección, mientras que en España su impacto alcanza al 5,6 por ciento de adultos, con cifras más elevadas en pacientes hospitalizados, principalmente en unidades geriátricas (10,3%) y servicios de neurología (7,5%).

"Debemos sospechar la presencia de disfagia cuando un paciente al comer o beber tosa con frecuencia, le cambie la calidad de la voz, se desature (disminución significativa del nivel de oxígeno), sea incapaz de mantener el bolo alimenticio en la boca, no pueda realizar el sello labial, babee, le quede comida en la boca o a nivel faríngeo tras la deglución, no pueda tragar el bolo alimenticio en una única deglución, sufra frecuentes infecciones respiratorias, se deshidrate con frecuencia o se desnutra", ha explicado la vocal de Asistencia de la SEEN y miembro del Área de Nutrición de la sociedad, Emilia Cancer.

La doctora ha detallado que la deglución permite nutrir e hidratar adecuadamente, por lo que su alteración produce desnutrición y/o deshidratación, así como aspiraciones orofaríngeas que pueden generar infecciones respiratorias. "Hasta un 50 por ciento de los pacientes que presentan aspiración desarrollan neumonía, siendo la complicación más temida de la disfagia, ya que constituye entre el cinco y el 15 por ciento del total de las neumonías adquiridas y puede tener una mortalidad asociada del 50 por ciento. No es un problema menor", ha precisado.

Todo esto empeora la calidad de vida y la supervivencia del paciente, además de aumentar las estancias hospitalarias y los costes sanitarios. Desde la SEEN han incidido en la especial atención que requieren los pacientes mayores que presentan presbifagia, una condición que afecta a entre el 10 y el 30 por ciento de los mayores de 65 años, superando el 80 por ciento en mayores de 80 años; así como en los pacientes frágiles e ingresados, en los que la cifra también se incrementa de forma notable.

Además, Emilia Cancer ha apuntado que el miedo a atragantarse y la necesidad de texturas modificadas en su alimentación dificulta que los pacientes participen en comidas familiares y sociales, lo que puede generar aislamiento social. "Muchos pacientes dejan de disfrutar de algo tan cotidiano como comer. Esto afecta a su bienestar emocional y a su integración social. El tratamiento no solo es clínico, también humano", ha señalado.

TRATAMIENTO Y EL ROL DEL ENDOCRINO

El tratamiento de la disfagia puede ser compensatorio, rehabilitador o una combinación de ambos, e incluye adaptación de texturas y viscosidades (evitando alimentos con grumos, pegajosos, duros o con líquido en su interior), posturas seguras durante la ingesta, higiene oral estricta, espesantes y aguas gelificadas para garantizar la hidratación, menaje adaptado, supervisión del cuidador y ejercicios de deglución y rehabilitación muscular.

Cuando la alimentación por vía oral no es segura o existe desnutrición y/o sarcopenia, es necesaria una intervención nutricional especializada. "La disfagia sarcopénica se debe a la sarcopenia, es decir, a la pérdida progresiva de masa y fuerza muscular de los músculos de todo el cuerpo y de la deglución. Es un factor de riesgo importante para desarrollar desnutrición, ya que condiciona una ingesta oral reducida", ha explicado Emilia Cancer.

En este sentido, ha señalado que el tratamiento de la disfagia debe ser integral y combinar evaluación clínica, adaptación de dieta, rehabilitación y soporte nutricional, debiendo hacer especial énfasis en la prevención de sus consecuencias, sin olvidar tampoco la necesidad de acompañamiento del paciente. Para ello, requiere de un equipo multidisciplinar de especialistas que incluya la colaboración de endocrinólogos, otorrinolaringólogos, rehabilitadores, logopedas, geriatras, digestivos, neurólogos y oncólogos.

"El especialista en Endocrinología y Nutrición, con su visión holística del problema, aporta las soluciones más integradoras, multi e interdisciplinares, que permitirán mejorar la seguridad del paciente y su calidad de vida. De hecho, desde la SEEN nos estamos implicando en ello fuertemente, desarrollando diferentes herramientas de formación para cuidadores, pacientes y profesionales con el objetivo de apoyar la atención de los pacientes con disfagia, como el Aula Virtual SEEN", ha destacado la especialista.

El estudio RECALSEEN realizado por la sociedad destaca la presencia y participación de los endocrinólogos en comisiones clínicas de disfagia hasta en el 40,5 por ciento de los centros hospitalarios y también la existencia de consultas monográficas de disfagia orofaríngea en el 38,8 por ciento de los servicios de endocrinología de los centros hospitalarios de España.

A su vez, la SEEN ha puesto en valor la creación de la 'International Dysphagia Diet Standardisation Initiative' (IDDSI), que ha permitido definir globalmente las texturas de alimentos y viscosidades de líquidos para mejorar la seguridad. También ha resaltado nuevas propuestas como la gastronomía molecular aplicada a la disfagia dentro de la restauración adaptada e innovaciones en rehabilitación neuromoduladora con resultados prometedores.

Con esto, la doctora Cancer ha señalado que el reto ahora se encuentra en su implementación en hospitales, residencias y hogares, así como en aumentar formación a cuidadores y profesionales. "Se debe establecer un plan de atención nutricional individualizado, cribado temprano, disponer de algoritmos de actuación y llevar a cabo un abordaje multidisciplinar para frenar complicaciones graves", ha concluido la doctora.

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