MADRID, 28 Dic. (EUROPA PRESS) -
Investigadores del Newcastle University (Reino Unido) han encontrado, en un estudio publicado en el 'The American Journal of Pathology', un tratamiento prometedor para los déficits cognitivos asociados con la enfermedad hepática colestásica.
Los pacientes con enfermedad hepática colestásica, como la colangitis biliar primaria (CBP), pueden experimentar un deterioro significativo de la bilis fluir y puede desarrollar síntomas neurológicos que incluyen fatiga y deterioro cognitivo.
En este sentido, los expertos han observado que el ácido obeticólico, un fármaco que ya se usa para tratar de manera segura a los pacientes con CBP que no responden bien al tratamiento de primera línea, puede revertir el deterioro cognitivo.
Usando un modelo de roedor establecido de colestasis inducida por ligadura de conductos biliares, los investigadores primero exploraron el alcance del deterioro cognitivo del tipo observado en pacientes colestásicos humanos.
Los ratones colestásicos y de control se sometieron a una prueba de laberinto en Y para evaluar la memoria espacial ya corto plazo. Mostraron déficits cognitivos y de memoria a corto plazo en comparación con los controles. El análisis patológico de los cerebros de ratones colestásicos encontró cambios cerebrales significativos, incluida la pérdida de la integridad de la barrera hematoencefálica, anomalías en la función del hipocampo y, sorprendentemente, senescencia o deterioro de las neuronas asociadas con el envejecimiento.
A continuación, los investigadores analizaron si los medicamentos comúnmente utilizados para tratar la PBC eran efectivos para revertir estos procesos en los ratones. Ni el tratamiento de primera línea para la CBP, el ácido ursodesoxicólico (UDCA), ni el bezafibrato, un tratamiento de segunda línea cada vez más utilizado, mejoraron significativamente la memoria a corto plazo ni revirtieron la senescencia neuronal.
Por el contrario, el ácido obeticólico (OCA), una terapia de segunda línea para la CBP y el agente anticolestásico más potente aprobado para su uso en la CBP hasta la fecha, revirtió el deterioro cognitivo, restauró la integridad de la barrera hematoencefálica, normalizó la función del hipocampo y también revirtió las neuronas.