MADRID 15 Feb. (EUROPA PRESS) -
El asma leve puede manejarse sin utilizar la dosis diaria del inhalador preventivo con corticosteroides que emplean los pacientes con esta enfermedad, que puede generar problemas de crecimiento y que los niños suelen olvidar administrarse. Así lo demuestra un estudio desarrollado por investigadores de la Universidad de Arizona, en Estados Unidos, que se publica en 'The Lancet'.
Esta enfermedad causa una inflamación en los conductos que llevan el aire desde y hasta los pulmones y que, si se irritan, hacen estrecharse las vías aéreas, que se produzca mucosidad y que la respiración se vuelva más difícil. Muchos médicos creen que el tratamiento diario del asma es el más efectivo, pero este grupo de Arizona creen que hay un problema con el manejo de la citada patología.
Para el tratamiento del asma existen dos tipos de inhaladores: "aliviadores", que se usan cuando el paciente tiene dificultades para respirar, y "preventores", que deben tomarse cada mañana y tarde. Sin embargo, estos investigadores dicen que muchos niños dejan de tomar la medicación diaria cuando los síntomas desaparecen.
En declaraciones a la BBC recogidas por Europa Press, el profesor Fernando Martínez, de la Universidad de Arizona, ha dicho que, "si se cuenta con un fármaco diario y un importante número de pacientes no lo está tomando, esto es que se trata de una estrategia fallida". "Queremos encontrar algo más fácil para niños y padres y evitar los efectos de estos fármacos para el asma en el crecimiento", dicen.
Un total de 288 niños y adolescentes con asma leve y persistente ha participado en este estudio, desarrollado en 44 semanas y que ha demostrado que tomar corticosteroides dos veces al día es todavía el tratamiento más efectivo, pero que aquellos pacientes que toman esta medicación crecen cerca de 1,1 centímetros menos que los niños que no tomaron este fármaco durante el ensayo.
El asma se pudo manejar sin necesidad de utilizar su tratamiento diario si se combinaban los corticosteroides con inhaladores para aliviar los síntomas. Esta medida hacía desaparecer los efectos del fármaco sobre el crecimiento de los pacientes. Para los investigadores, esta podría ser la forma más fácil de tratar a los niños con este problema.
No obstante, el profesor Martínez dice que "continúa recomendando la dosis diaria de corticosteroides a sus pacientes, aunque sabe que algunos no lo toman".