MADRID, 15 Ene. (EUROPA PRESS) -
La doctora Paz Collado, reumatóloga del Hospital Universitario Severo Ochoa de Madrid, ha resaltado que la ecografía músculo-esquelética (Eco-Me) es una de las técnicas de imagen clave para el diagnóstico y seguimiento de niños con artritis idiopática juvenil (AIJ), una enfermedad que afecta aproximadamente a 1 de cada 1.000 menores de 16 años.
"Ha demostrado ser más sensible en la detección de inflamación que el examen físico, por lo que debe indicarse ante cualquier duda clínica en un niño con una sospecha de artritis de reciente inicio", ha comentado Collado durante la jornada 'Ecografía Pediátrica, Valor y Formación', que ha contado con el apoyo de la compañía biofarmacéutica Abbvie.
La experta ha añadido que esta técnica además es "capaz de identificar precozmente cuál es la localización exacta de dicha inflamación, intra-articular, tenosinovial o entésica". "Estos hallazgos ecográficos pueden tener implicaciones para la clasificación del niño dentro de un subtipo más específico de AIJ y en consecuencia, de su manejo", ha recordado.
Para la experta, el conocimiento del número de articulaciones activas y la presencia de factores de mal pronóstico (artritis de cadera, tobillo o muñeca, y la existencia de erosiones) permite "una aproximación hacia un manejo terapéutico más preciso". Según Collado, otra de las ventajas de la Eco-Me es la capacidad para "detectar cambios en las estructuras inflamadas y, por tanto, monitorizar la evolución de la enfermedad y la respuesta terapéutica".
"La Eco-Me ha demostrado la detección precoz del daño estructural en determinados huesos de la mano de niños con AIJ cuando se compara con la radiología convencional y RNM. Por lo tanto, puede indicarse como herramienta útil en el seguimiento de la AIJ", ha concluido Collado.