GINEBRA, 25 Ene. (Reuters/EP) -
El brote de ébola que sufre República Democrática del Congo (RDC) desde principios de agosto se ha extendido a una zona considerada de alto riesgo, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), que cifra en 713 los casos y en 439 los fallecidos como consecuencia de esta fiebre hemorrágica.
La mayoría de los casos detectados este año corresponden a la zona de Katwa, donde el personal de la OMS se ha topado con la "desconfianza" de la población local, lo que ha derivado en que muchas personas no se hayan registrado como potenciales contactos de enfermos.
"El brote también se ha extendido al sur, hacia la zona de Kayina, un área de máximo riesgo", ha explicado la OMS, que ha confirmado al menos cinco casos. Kayina está ubicada entre la zona con más casos y la urbe de Goma, cercana a la frontera con Ruanda.
La agencia internacional ha realizado ya simulacros en Ruanda para preparar un posible salto del brote y ha enviado un equipo a este país para formar y vacunar a los trabajadores que podrían estar en la primera línea de lucha.
Una portavoz de la OMS, Fadela Chaib, ha celebrado sin embargo la reducción de los casos en Beni. Así, aunque ve "muy prematuro cantar victoria", sí que ha subrayado que las medidas adoptadas en esta zona clave durante los últimos meses "han tenido impacto".
"El país no solo se enfrenta al ébola sino también a otras amenazas médicas, como por ejemplo malaria, cólera, polio y también una larga crisis humanitaria y mucha violencia en varias regiones", ha añadido Chaib, al aludir a los desafíos que parecen acumularse en República Democrática del Congo.