MADRID, 4 May. (EUROPA PRESS) -
El Servicio de Cirugía Torácica del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid ha diseñado e implantado a un paciente, con un tumor complejo en el pecho, una prótesis de titanio impresa en 3D, que sustituye parte de sus costillas y esternón.
La prótesis respeta el movimiento de expansión del pecho para respirar y ha permitido ofrecer un tratamiento a una persona que sufría un tumor muy agresivo en el esternón, las costillas y las estructuras cercanas del corazón.
"El reto, en este caso, no era solamente la extirpación de las costillas, el esternón, parte del pulmón derecho, la glándula tímica y la mayor parte del pericardio, sino la reconstrucción torácica de un defecto tan grande para el que no existían alternativas viables con los sistemas de placas convencionales. Por eso fue necesario diseñar una solución a medida", ha explicado el jefe asociado del servicio de Cirugía Torácica del Hospital Universitario Quirónsalud Madrid y responsable del diseño de la prótesis y la intervención, Javier Moradiellos.
Para abordar este caso se ha diseñado la primera prótesis biomecánica del esternón y seis costillas mediante impresión en 3D en titanio. "La denominamos prótesis biomecánica porque su diseño imita la articulación y la configuración de la pared torácica normal, permitiendo una mecánica respiratoria fisiológica, así como su integración con los huesos del paciente", ha recalcado.
EL TITANIO SE INTEGRA CON LOS HUESOS Y ES RESISTENTE Y LIGERO
En concreto, el diseño de la prótesis se ha iniciado con la información de tomografía computarizada de la anatomía del enfermo. Tras el estudio de la zona que iba a ser extirpada, se diseñó una prótesis de una sola pieza para evitar dislocaciones y desplazamientos y para que funcionase mecánicamente como una unidad. El material elegido fue el titanio porque se llega a integrar con los huesos con el tiempo y es un material resistente y ligero.
El implante a medida se ha elaborado mediante un proceso de impresión en 3D denominado 'fabricación por haz de electrones' (EBM, por sus siglas en inglés), por el que se va depositando y fundiendo titanio en polvo hasta que se solidifica en un entorno de vacío. Se trata de un procedimiento que permite elaborar formas intrincadas y de gran complejidad como las de este implante con una precisión absoluta en las medidas".
"La impresión en tres dimensiones de materiales protésicos tiene un extraordinario potencial en cirugía oncológica al facilitar intervenciones más radicales en pacientes que, hasta ahora, no hubieran podido ser considerados para ellas", ha zanjado el doctor Moradiellos.