El consumo de tabaco de jóvenes españoles supera la media europea y norteamericana.
MADRID, 18 Abr. (EUROPA PRESS) -
Cerca de 200 jóvenes de toda la Unión Europea elaboraron en mayo de 2006 un manifiesto basado en las opiniones de más de 10.000 pares de los todos los países miembros. En el mismo piden que el acceso a los centros de deshabituación tabáquica y el apoyo psicológico sea gratuito, y que se prohíba cualquier forma de publicidad de tabaco, entre otros puntos.
Luz María López, encargada de Salud del Consejo de la Juventud de España, se refirió hoy al surgimiento de lo que denominó el "primer manifiesto elaborado por jóvenes y dirigido a jóvenes" contra el hábito que es la primera causa de muerte en el mundo, en el marco de la presentación de esta iniciativa de la Unión Europea y la campaña 'Help, por una vida sin tabaco'.
En noviembre 2005, la Comisión Europea convocó a los representantes de los Consejos juveniles de los distintos países para invitarlos a participar de la actividad. Entonces, se acordó que cada país haría rondas de consultas para recabar la opinión de los jóvenes en relación al tabaco. En España, se colgó en una página web un cuestionario de 70 preguntas cerradas que respondieron 375 personas de 30 a 35 años, y se organizaron campañas en la vía pública.
Finalmente, el 21 de mayo de 2006 cerca de 200 representantes de todos los miembros de la Comunidad Europea se reunieron en Bruselas para pedir a los gobiernos que se implementen medidas de apoyo a largo plazo para las organizaciones juveniles que trabajan por la prevención y reducción de los daños del tabaquismo.
Asimismo, el manifiesto solicita que las campañas se centren en los aspectos positivos de no fumar, que la educación sobre salud se inicie en la más temprana edad escolar y se prolongue durante todas las etapas del proceso educativo, y que no se venda tabaco a menores de 18 años.
Además, los jóvenes europeos pretenden que se prohíba la introducción de productos aditivos potenciadores y de sustancias cancerígenas en los cigarros, y que se implante un empaquetado en blanco y negro unificado que lleve impreso advertencia y, en el lado inferior, imágenes de personas u órganos que hayan sufrido los efectos dañinos del tabaco.
Para los no fumadores, los jóvenes piden que no se permita fumar en los lugares de trabajo y espacios públicos cerrados, y que se anime a los padres para que participen en la educación de la salud.
UNO DE CADA 5 JOVENES ESPAÑOLES FUMAN.
En representación de la campaña 'Help, por una vida sin tabaco', Carlos Ariza aseguró que España está por encima de la media europea en cuanto a la adicción de los jóvenes por el tabaco.
Mientras que en Europa el 18,1 por ciento de los varones y el 16,9 por ciento de las mujeres fuman a diario, España alcanza un 18,4 y 24,1 por ciento, respectivamente. El porcentaje supera además el consumo cotidiano de Estados Unidos, que afecta a un 13,5 por ciento de varones y mujeres.
Además, Ariza señala que mientras en Norteamérica el 14,2 por ciento de los varones y el 7,2 por ciento de las mujeres jóvenes fuman más de diez cigarrillos por día, en España lo hacen un 22,7 y 20 por ciento respectivamente.
De todas maneras, el especialista se contentó de que entre 1999 y 2004 "hay un marcado descenso de consumo de tabaco entre los jóvenes de 16 años en Barcelona", muestra que se puede extrapolar al resto del territorio español.
Ariza llama la atención sobre el hecho de que la dependencia de la nicotina comienza a los dos meses del inicio del hábito, por lo que "es muy importante ayudar a dejar de fumar a los jóvenes lo antes posible, incluso antes de dejar la escuela".
Finalmente, el especialista recuerda que el tabaquismo provoca el 14 por ciento de todas las muertes que ocurren en España, donde uno de cada cuatro varones fenece por su causa. Además, anualmente mueren en el país entre 3.000 y 11.000 personas que no fuman pero se exponen al humo del tabaco en el hogar, el trabajo y el tiempo libre.
