La diástasis de los rectos abdominales se puede corregir a través de una técnica endoscópica, según experto

Archivo - Quirófano, anestesia, operación, intervención quirúrgica.
Archivo - Quirófano, anestesia, operación, intervención quirúrgica. - GETTY IMAGES/ISTOCKPHOTO / MONKEYBUSINESSIMAGES
Publicado: martes, 2 abril 2024 11:23

MADRID 2 Abr. (EUROPA PRESS) -

La técnica de reparación endoscópica pre-aponeurótica (REPA), una cirugía mínimamente invasiva para la diástasis de rectos abdominales, "permite no sólo la corrección estética, sino también la reparación de posibles problemas asociados de la pared abdominal", con una "cicatriz mínima" y "una recuperación precoz", según detalla el experto en Cirugía General y del Aparato Digestivo del Hospital Quirónsalud San José, el doctor Jorge Martín Gil.

En concreto, la técnica consiste en un abordaje endoscópico con la realización de 3 pequeñas incisiones (inferiores a 1cm) en la parte inferior del abdomen. Para obtener resultados, desde Quirónsalud precisan que deben cumplirse dos indicaciones: que la diástasis sea superior a 3 cm y que no exista excesiva flacidez cutánea.

"Además, es imprescindible -añade el experto- que las mujeres que se sometan a ella hayan cumplido su deseo gestacional y ya no deseen tener más hijos".

Los rectos abdominales son músculos que cumplen dos funciones principales, entre las que destaca, por una parte, la respiración, favoreciendo la espiración y limitando la inspiración; y por otra, el mantenimiento del cuerpo erguido y la flexión del tronco.

Las fibras musculares de los rectos abdominales están unidas entre sí por un tejido fibroso de colágeno denominado 'línea alba'. El daño en este tejido conectivo es el responsable de la excesiva separación de los músculos abdominales, que puede derivar en una diástasis de rectos.

Así, la principal causa de diástasis de rectos es el embarazo y generalmente se manifiesta como una protuberancia en la línea media del abdomen por encima del ombligo.

Además, puede estar asociado a la aparición de otras patologías, como dolor de espalda crónico, hernias umbilicales u otras hernias de la línea media, incontinencia urinaria o trastornos digestivos.