MADRID, 22 Mar. (EUROPA PRESS) -
La utilización del test de sangre oculta en heces puede reducir hasta en un 40 por ciento la mortalidad del cáncer de colon, gracias a la detección en fase precoz de la enfermedad, según ha señalado el jefe del Servicio de Análisis Clínicos del Hospital La Paz de Madrid y miembro de la Sociedad Española de Medicina de Laboratorio (SEQCML), Antonio Buño.
"La detección de sangre en heces es la prueba que incorporan todos los programas de cribado de población de cáncer colorrectal como primer paso", ha explicado el doctor Buño, quien ha precisado que, en función del resultado, se puede indicar un estudio de colonoscopia para determinar la causa del sangrado y poder establecer un diagnóstico definitivo.
Este test posibilita además la detección y extirpación de pólipos precancerosos para prevenir el desarrollo de tumores malignos o su detección en estadios precoces. "El test de sangre oculta es una prueba incruenta y sencilla de realizar, incluso pudiendo el mismo paciente realizar la toma de muestra en su propio domicilio", ha detallado el especialista.
El cáncer colorrectal (CCR) es el tumor maligno más frecuente si se consideran ambos sexos y tiene una mortalidad elevada, debido a que la mayoría de los casos se presentan en fase avanzada. Sin embargo, cuando es detectado a tiempo presenta una tasa de curación muy alta, cercana al 90 por ciento.
Por ello, el doctor ha considerado tan importante detectarlo en etapas tempranas. "El test detecta la presencia de sangre en el tubo digestivo, especialmente en los tramos finales. Por tanto, cualquier enfermedad que implique un sangrado del tubo digestivo podría beneficiarse de esta prueba más allá del cáncer colorrectal", ha añadido.
IMPLANTACIÓN DESIGUAL
Los programas de cribado de cáncer colorrectal en España comenzaron a implantarse en el año 2000, sin embargo, el grado de implantación varía en función de cada administración regional. "Todas las comunidades tienen su propio programa, aunque con algunas diferencias entre ellos, pero el grado de implantación sigue siendo muy desigual y claramente insuficiente", ha valorado el especialista.
La población a la que va dirigido este cribado son ciudadanos entre 50 y 69 años, aunque en algunos casos se eleva el intervalo de edad hasta los 74 y la participación ha rondado el 50 por ciento en las últimas campañas. En estas, el número de tests realizados que fueron positivos se ha acercado al 7 por ciento, según precisa el doctor.
El especialista ha recordado que el método de detección precoz del cáncer colorrectal mediante esta prueba es coste-eficaz. "Cubrir a toda la población con los programas de cribado supondría un coste total de 65 millones de euros, lo que representa el 6% del coste del tratamiento", ha destacado.
El coste del test es de tan solo 2-3 euros, aunque el doctor ha recalcado que en estos casos no hay que ver el coste aislado de la prueba, sino el del programa completo. "Es muy importante que esté adecuadamente organizado, bien diseñado, con una buena estrategia de comunicación, difusión y concienciación ciudadana", ha señalado el experto.
MEJORAS EN EL TEST
Desde hace años es posible medir la presencia de hemoglobina humana mediante los llamados métodos inmunoquímicos. Tras las mejoras técnicas, especialista ha indicado que el siguiente reto es "que programas de cribado poblacional se extiendan al 100 por cien de los ciudadanos, tanto para éste como para otros tipos de cáncer".
En ese contexto, el doctor Buño ha puesto en valor el papel de los profesionales de Medicina de Laboratorio en la extensión del uso de estos tests. "Los profesionales que trabajamos en los laboratorios clínicos debemos asegurarnos de que las prestaciones del método de medida sean útiles para el paciente. Somos los responsables de validar el método de medida y asegurar la calidad analítica de los resultados, entre otras cuestiones. Además, debemos participar, junto con el resto de los profesionales implicados, en el desarrollo, seguimiento y evaluación de los programas", ha concluido.