MADRID, 16 Nov. (EUROPA PRESS) -
El estudio realizado por investigadores del Registro de Cáncer de Noruega y del Instituto de Investigación Médica del Hospital del Mar en Barcelona muestra que la detección personalizada del cáncer de mama podría mejorar la supervivencia del cáncer y reducir el sobrediagnóstico, y ha creado un modelo para predecir el riesgo individual que podría usarse para crear estrategias personalizadas de cribado de esa enfermedad.
Los investigadores, que utilizaron datos del Registro de Cáncer de Noruega (Oslo), señalan que su investigación también podría significar que haya menos personas que sufran 'falsos positivos' y 'sobrediagnóstico', que es cuando las personas son diagnosticadas y tratadas por un cáncer que crece extremadamente lentamente y no ha causado ningún problema durante su vida.
"Conocemos muchos de los factores que influyen en el riesgo de cáncer de mama. Por ejemplo, envejecer, tener antecedentes familiares de cáncer de mama y algunos tipos de enfermedades mamarias benignas pueden aumentar el riesgo. No podemos hacer mucho sobre esos factores de riesgo, pero sí podemos usar esta información para predecir el riesgo de cáncer de mama", ha señalado en el doctor Javier Louro del Hospital del Mar, en el 13 Congreso Europeo de Cáncer de Mama, donde ha sido presentado el estudio.
La investigación incluyó datos de alrededor de 50.000 mujeres que participaron en BreastScreen Norway entre 2007 y 2020. BreastScreen Norway es un programa nacional que invita a todas las mujeres de 50 a 69 años a hacerse una mamografía (una radiografía de mama) cada dos años. Los programas de detección pueden ayudar a mejorar las tasas de supervivencia al garantizar que los cánceres se detecten lo antes posible.
Los investigadores utilizaron datos sobre diez factores de riesgo conocidos para estimar los riesgos de las mujeres individuales de desarrollar cáncer de mama durante un período de cuatro años. Estos incluían la edad, antecedentes familiares de cáncer de mama, enfermedad mamaria benigna anterior, densidad mamaria (una medida de las glándulas y el tejido fibroso de la mama), índice de masa corporal y consumo de alcohol.
Compararon estos factores de riesgo en mujeres con y sin diagnóstico de cáncer de mama para evaluar el impacto de cada factor de riesgo individual, desarrollar el modelo y verificar si el modelo era preciso en términos generales. Descubrieron que el riesgo de desarrollar cáncer de mama durante un período de cuatro años varió desde un 0,22% para algunas personas hasta un 7,43% para otras, con un riesgo promedio (mediana) de 1,10%.
La investigación también indicó que algunos factores eran más importantes de lo que se pensaba anteriormente, por ejemplo, el efecto protector de cuántas horas de ejercicio hace una mujer a la semana. Este es un factor que no suele incluirse en los modelos de predicción del riesgo de cáncer de mama.
"Hemos desarrollado y validado con éxito un modelo para estimar el riesgo de cáncer de mama en mujeres que participan en BreastScreen Norway, el programa nacional de detección de cáncer de mama en Noruega. Se han creado varios modelos de predicción del riesgo de cáncer de mama, pero creemos que este es uno de los primeros modelos diseñados para guiar las estrategias de detección de mama a lo largo de la vida de una persona utilizando datos reales de un programa de detección", señala.
"Nuestro modelo podría considerarse clave para diseñar pruebas de detección personalizadas destinadas a reducir los daños y aumentar los beneficios de las mamografías. Por ejemplo, a alguien con bajo riesgo se le podría ofrecer una mamografía estándar cada tres o cuatro años en lugar de cada dos años. A alguien con riesgo medio se le puede ofrecer una mamografía 3D avanzada cada dos años, mientras que a las personas con un riesgo alto se les puede ofrecer una nueva prueba de detección con mamografía o resonancia magnética cada año. Todas estas estrategias aún son teóricas y deben estudiarse con respecto a su efectividad", añade el investigador.
Los investigadores advierten que sus hallazgos hasta el momento se basan en un programa de detección en un país. La técnica de predicción de riesgos ahora necesita más trabajo, como un estudio similar en un entorno diferente o una simulación por computadora, para comprender el impacto de la detección personalizada de mamas.