MADRID, 18 Ene. (EUROPA PRESS) -
Investigadores del Marienhospital de Gelsenkirchen, en Alemania, han visto que las personas que se someten a una amigdalectomía para extirpar sus amígdalas o anginas tienen una mejor calidad de vida ya que, entre otras cuestiones, sufren menos dolores de garganta y faltan menos al trabajo.
El trabajo, publicado en la revista 'Deutsches Ärzteblatt Internacional', pretendía analizar los efectos a largo plazo de esta intervención quirúrgica, para lo que sometieron a diferentes cuestionarios a un total de 114 pacientes adultos que se habían operado en 2004.
El primer cuestionario lo completaron antes de la amigdalectomía y los siguientes 14 meses y 7 años después de la operación, e incluía diferentes preguntas sobre la incidencia del dolor de garganta y factores relacionados con su calidad de vida.
Al comparar sus respuestas, vieron como los participantes pasaron de sufrir dolor de garganta casi diez veces al año antes de la operación a apenas un par de veces. Asimismo, después de la amigdalectomía las visitas al médico de los participantes también se redujo, de cinco anuales a apenas una.
Y en relación con aspectos más generales del día a día, vieron como también afectaba al absentismo laboral, ya que pasaron de una media de 11 a menos de dos días de baja al año. Además, después de la cirugía también mejoraron otros indicadores relacionados con el bienestar general, las relaciones sociales y la salud física.
En virtud de estos resultados, los autores concluyen que las personas con dolores de garganta recurrentes que se someten a una amigdalectomía experimentarán mejoras en la salud a largo plazo, ya que también requerirán menos medicación, y también estarán más satisfechos con su vida posterior.