Los desfibriladores en gimnasios reducirían en un 40% la muerte súbita

Actualizado: domingo, 30 agosto 2009 16:10

El ejercicio reduce a la mitad el riesgo de infarto también en enfermos cardiacos

BARCELONA, 30 Ago. (EUROPA PRESS) -

La instalación de desfibriladores semiautomáticos en gimnasios podría evitar en un 40 por ciento de casos la muerte súbita de personas que practican deporte, según un estudio presentado hoy en el Congreso de la Sociedad Europea de Cardiología en Barcelona.

El estudio analizó la relación entre muerte súbita y deporte en 404 personas de a pie con una edad media de 47 años y que en el momento de la muerte llevaba a cabo una actividad física intensa en el 40 por ciento de los casos.

El trabajo reveló que solo un 28 por ciento de los fallecidos tenía algún factor de riesgo o patología coronaria conocida y que en la mayoría la arritmia que causó la muerte --recuperable en un 40 por ciento de los afectados-- se había producido en una instalación deportiva.

Por ello, el Presidente de la Asociación de Arritmias de la European Society of Cardiology (ESC), Josep Brugada, reclamó una legislación 'clara' que obligue a instalar desfibriladores semiautomáticos en los centros deportivos y que garantice la formación del personal para reconocer una pérdida de conocimiento, realizar masaje cardiaco y aplicar el aparato al paciente.

Explicó que ante una pérdida de conciencia por arritmia se dispone de entre cinco y diez minutos para reanimar a la persona, y que por lo tanto deberían instalarse desfibriladores en lugares públicos "del mismo modo en el que se instalan extintores". Lamentó, por ejemplo, que el aeropuerto del Prat de Barcelona no cuente con desfibriladores, a diferencia de otros aeropuertos internacionales.

Asimismo, recomendó que la práctica de ejercicio físico se inicie poco a poco, tras un adecuado control médico y teniendo en cuenta los factores de riesgo y la edad y condición física de cada persona, especialmente de las mayores de 50 años.

Otros estudios presentados hoy en el Congreso revelan que la práctica regular de ejercicio físico reduce a la mitad el riesgo de infarto de miocardio y de ictus --infarto cerebral-- al aumentar la estabilidad eléctrica del corazón y reducir el riesgo de padecer arritmias, también en pacientes que ya han sufrido alguna enfermedad cardiovascular.

El investigador en Epidemiología y Genética Cardiovascular del Instituto Municipal de Investigación Médica de Barcelona, Roberto Elosua, explicó que el ejercicio también reduce la magnitud de los infartos de miocardio en caso de que se produzcan. Asimismo, aumenta las células madre precursoras de las endoteliales que recubren las arterias, mejorando su funcionamiento y capacidad de dilatación.

Sin embargo alertó de que el 55 por ciento de adultos en España no realiza ninguna actividad física en su tiempo libre, y que la prevalencia del sedentarismo --solo superada por Portugal-- es superior a la media europea.