BARCELONA, 16 Sep. (EUROPA PRESS) -
El Hospital Clínic de Barcelona ha desarrollado un "revolucionario" test no invasivo que mide la madurez de los pulmones en fetos, lo que permite prever enfermedades y evitar muertes prematuras, según ha explicado este martes en rueda de prensa el responsable del Servicio de Medicina Materno-Fetal del centro, Eduard Gratacós.
El test, bautizado como 'QuantusFLM', ha sido desarrollado a través de la 'spin-off' del Clínic y se basa en el análisis automático de una imagen de ultrasonido: "Se trata de un sistema informático que ofrece resultados fiables en tres minutos", ha manifestado Gratacós.
El funcionamiento del 'QuantusFLM' se basa en el análisis computerizado de una imagen de los pulmones del feto que obtiene el médico a través de una simple ecografía: el sistema la examina rápidamente y elabora un informe que contiene el riesgo del feto de sufrir algún tipo de morbilidad respiratoria al nacer.
"Supone una gran revolución en este tipo de tests, pues es la primera alternativa 100% no invasiva a los actuales métodos que requieren de una amniocentesis previa", ha añadido, y ha destacado que permite detectar el síndrome de distrés respiratorio (SDR) neonatal, que impide a los pulmones funcionar correctamente tras el nacimiento.
Se trata de la complicación más frecuente en bebés y supone la primera causa de ingreso en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) y de muerte neonatal: "Cuánto menos maduros están los pulmones del recién nacido, más grande es la probabilidad de que se presente esta enfermedad".
La presentación se ha enmarcado en el Congreso Mundial de Ultrasonidos en Ginecología y Obstetricia, y ha contado con la participación del director del Clínic, Josep Maria Piqué, y del investigador norteamericano Edgar Hernández-Andrade, que ha revelado que el sistema ya se usa en algunos centros de EUA.
CONSULTAS PRIVADAS
Gratacós ha dicho que "se han recibido peticiones de todos los rincones del planeta" para poder utilizar este sistema de análisis, especialmente de médicos con consultas privadas que persiguen ofrecer una respuesta inmediata a las pacientes con riesgo de parto prematuro.
El coste de la prueba es de unos 70 euros y se prevé que puede aplicarse a entre un 2% y un 3% de las embarazadas; Piqué ha avanzado que los hospitales públicos catalanes podrían incorporarla si los equipos directivos estiman que puede adaptarse a su sistema de funcionamiento y presupuesto.
