MADRID, 30 Ago. (EUROPA PRESS) -
Un equipo multidisciplinar de científicos, dirigido por el profesor Peter Carmeliet, del VIB-KU Leuven Center for Cancer Biology (Países Bajos), ha realizado varios descubrimientos innovadores sobre el metabolismo de los componentes individuales de los vasos sanguíneos: las llamadas células endoteliales.
Han identificado tres proteínas clave que determinan cómo crecen y se comportan los vasos sanguíneos, y que pueden convertirse en nuevos objetivos terapéuticos en los trastornos relacionados con los vasos sanguíneos, como los cánceres potencialmente mortales y las enfermedades oculares que causan ceguera. Por su investigación pionera, Peter Carmeliet recibirá el Premio Heineken de Medicina 2018.
"Nuestros hallazgos han sido publicados en las principales revistas científicas, todo en una semana. Esto es realmente excepcional y muestra que esta nueva estrategia terapéutica prometedora puede tener implicaciones de gran alcance para los trastornos relacionados con los vasos sanguíneos y terapias. Recibir este premio es un enorme reconocimiento por el trabajo que mi grupo ha estado realizando y es un empujón importante para continuar realizando investigaciones de alto nivel que pueden afectar la vida de los pacientes en el futuro", comenta Carmeliet.
Todos los órganos del cuerpo humano dependen de los vasos sanguíneos para un suministro continuo de nutrientes y oxígeno. Esto hace que la vasculatura, la red completa de vasos sanguíneos, sea uno de los órganos más grandes e importantes de nuestro cuerpo. En individuos sanos, la vasculatura es estable y realiza sus tareas diligentemente.
Sin embargo, en varias enfermedades graves como el cáncer o la diabetes, los vasos sanguíneos se descarrilan y comienzan a crecer excesivamente o pierden por completo su función normal. Dada la prevalencia cada vez mayor de cáncer y diabetes, se necesitan "urgentemente" nuevas terapias para los trastornos relacionados con los vasos sanguíneos, que deberían basarse en mecanismos moleculares completamente diferentes a las estrategias actualmente disponibles (principalmente anti-VEGF), que muestran "un éxito limitado debido a los mecanismos de resistencia y la baja eficacia general".
Para comprobar qué determina exactamente el comportamiento normal y anormal de los vasos sanguíneos, la investigación se ha centrado durante décadas en la célula endotelial, el bloque de construcción individual de un vaso sanguíneo. Sin embargo, Carmeliet y su equipo fueron los primeros en revelar un papel fundamental para el metabolismo de la célula endotelial en la formación y función de los vasos sanguíneos. Así, esta investigación ha identificado tres nuevos posibles objetivos terapéuticos en los trastornos relacionados con los vasos sanguíneos: CPT1A, FASN y glutamina sintetasa.