MADRID 6 May. (EUROPA PRESS) -
Neurólogos y pacientes con epilepsia europeos se reunirán el próximo 22 de mayo en Madrid en un encuentro internacional para analizar los beneficios de un nuevo fármaco derivado del cannabis para tratar a los pacientes que no logran controlar sus crisis con los fármacos que actualmente hay disponibles.
El fármaco es un purificado a partir del cannabis que ha sido desarrollado por GW Pharma y se conoce como 'Epidiolex', y se está probando ya en una centena de niños con epilepsias farmacoresistentes en Estados Unidos para confirmar su seguridad antes de comenzar ensayos clínicos, que podrían iniciarse también en Europa antes de fin de año.
"No se trata de promover el uso de cannabis para tratar enfermedades, sino de evaluar si el cannabidiol purificado podría convertirse en el fármaco que miles de afectados por epilepsias farmacoresistentes esperan", ha defendido Ana Mingorance, directora de Investigación de la Dravet Syndrome Foundation Spain y responsable del encuentro.
Se estima que un 1 por ciento de la población mundial sufre epilepsia y, de estos, hasta un tercio de los pacientes se consideran farmacoresistentes al no poder controlar sus crisis con los fármacos actuales.
Algo que le sucede también a los pacientes con el síndrome de Dravet, cuyos afectados, mayoritariamente niños, sufren una epilepsia muy agresiva que puede provocar la muerte.
Desde la Dravet Syndrome Foundation Spain recuerdan que cuando se habla de marihuana o cannabis medicinal es para referirse a cepas muy enriquecidas en cannabidiol, que se cree responsable de su actividad medicinal, y con bajos niveles de tetrahidrocannabidiol (THC), el compuesto psicoactivo responsable de sus efectos recreativos.
El principal problema para su uso médico, según añaden, radica en la variación entre distintos cultivos y los problemas legales derivados de su actividad psicoactiva, para lo que se debe purificar.
En España existe solo un precedente de medicamento aprobado derivado del cannabis, el 'Sativex', desarrollado también por GW Pharma, que contiene cannabidiol y THC a partes iguales y se usa para el tratamiento de dolor y espasticidad en pacientes con esclerosis múltiple.
"Como cualquier otro compuesto que se pretenda utilizar como medicamento, el cannabidiol debe pasar una evaluación rigurosa mediante ensayos clínicos para comprobar no solo su eficacia sino su seguridad y es precisamente para lo cual hemos convocado a la comunidad médica y de pacientes a este encuentro", ha insistido Mingorance.