Denuncian la falta de un tratamiento integral para mujeres víctimas de maltrato que son drogodependientes

Actualizado: jueves, 10 junio 2010 16:38

MADRID, 10 Jun. (EUROPA PRESS) -

El Instituto de la Mujer y la Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas han mostrado este jueves su preocupación porque en España no existe un tratamiento integral para las mujeres víctimas de malos tratos y, al mismo tiempo, son drogodependientes, un binomio que como aseguran "es tan frecuente como invisible".

Según ha explicado la directora del Instituto de la Mujer, Laura Seara, durante la jornada 'Investigación sobre la intervención en drogodependencias y malos tratos a mujeres en las redes de atención', organizada por la Unión de Asociaciones y Entidades de Atención al Drogodependiente (UNAD), la prevalencia de malos tratos es mayor en mujeres drogodependientes y, asimismo, también hay un mayor consumo de sustancias adictivas en mujeres víctimas de violencia (de género o intrafamiliar).

"Muchas mujeres maltratadas utilizan los psicofármacos, el alcohol u otras drogas para reducir su ansiedad y aliviar su malestar emocional", asegura Seara, quien sin embargo lamenta que el porcentaje de quienes reciben tratamiento por esta dependencia es muy bajo.

De hecho, la mayoría de centros de atención a la violencia de género no admiten a aquellas mujeres que refieren adicción a drogas y son derivadas a centros de desintoxicación, lo que conlleva que "el maltrato o la drogodependencia no reciben la atención que merece".

Lo mismo sucede con aquellas mujeres que acuden a centros de atención a la drogodependencia, de ahí que reclamen equipos multidisciplinares que permitan atender a aquellas mujeres que "esconden" un problema de maltrato, tanto por parte de su pareja como familiar.

Por el momento tan sólo hay algunos centros de Andalucía, Cataluña y País Vasco los que empiezan a aceptar a estas pacientes para ofrecerles un tratamiento ajustado a sus necesidades.

El problema, según ha reconocido la delegada del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas, Carmen Moya, es que "son pocas las mujeres drogodependientes que reconocen tener algún antecedente de violencia que pueda estar relacionado con su adicción", lo que hace que sea una relación poco estudiada y difícil de cuantificar.

De hecho, en el marco de esta jornada se ha presentado un pequeño estudio sobre la intervención que reciben estas mujeres en algunos centros de atención a ambos problemas de Madrid y la Comunidad Valenciana, que pone de manifiesto que "en la mayoría de casos no se declaran ambos problemas y, por tanto, ni se detectan ni se tratan como deberían", reconoce Patricia Martínez, autora del estudio.

ASUMEN LA VIOLENCIA COMO ALGO "NORMAL"

Según esta experta, las mujeres con problemas de adicción a alguna sustancia tienen una "alta tolerancia" a la violencia en sus relaciones, que queda inmersa en "lo cotidiano" y conlleva que vean como algo "normal" el comportamiento violento de sus parejas o su entorno familiar.

"Existe mucha culpabilización por ser drogodependiente y, como consecuencia, no poder cumplir los roles como madre o mujer del hogar que creen que deben de tener", lamenta Martínez.

Además, no lo reconocen porque supone una "doble penalización social", ya que "después de haber reconocido que eres maltratada, con lo que ello conlleva, tienes que decir que también eres adicta a determinadas sustancias".

Entre las sustancias más consumidas, Martínez asegura que "hay muchas mujeres que consumen alcohol en solitario", si bien "cada vez se están detectando más casos de mujeres que se inician en el consumo de cocaína, a la que acceden a través de su ámbito de ocio o laboral".