MADRID, 28 Dic. (EUROPA PRESS) -
Dentistas del Colegio de Odontólogos y Estomatólogos de la 1ª Región (COEM) han alertado de la importancia del diagnóstico y el seguimiento del bruxismo y de las férulas, ya que no todos los pacientes pueden tolerarlas, por lo que es esencial una valoración previa por parte de un profesional.
Esta patología, que puede provocar fisuras y roturas de las piezas dentales, hipersensibilidad y dolor dentario, tiene en las férulas u ortosis interoclusales la principal vía de tratamiento. Estos dispositivos requieren un diseño adecuado y personalizado, así como revisiones y ajustes periódicos por parte del profesional para su correcto funcionamiento. Deben ser de resina rígida y deben evitarse las férulas blandas de silicona por no poder personalizarse ni ajustarse periódicamente.
Por ello, es importante que el dentista realice un correcto diagnóstico diferencial del bruxismo con otro tipo de desgastes provocados por erosión (químico) o, por ejemplo, por abrasión (mecánico), así como que tenga en cuenta las características personales de cada paciente.
Desde el COEM han lanzado una serie de pautas que pueden servir para identificar esta patología, como son la aparición de pequeñas fracturas dentarias o dientes más cortos y astillados y ciertos dolores de cabeza y de mandíbula, así como en la zona de los oídos, que pueden ser síntomas de desórdenes craneomandibulares.
De igual manera, si ya se padece de bruxismo, es importante seguir las siguientes recomendaciones: tratar esta dolencia con el dentista, quien valorará la colocación o no de una férula; desconfiar de los precios excesivamente bajos, que pueden esconder baja calidad en los materiales empleados; y visitar al especialista cada seis meses.