VALENCIA 2 Jul. (EUROPA PRESS) -
El nuevo Hospital Universitari La Fe de Valencia contará con un sistema de resucitación y un programa personalizado que lo convertirán en un centro sanitario cardioprotegido. Por sus dimensiones, más de 260.000 metros cuadrados, será el mayor edificio público de la Comunidad Valenciana en contar con este dispositivo de respuesta asistencial inmediata a paradas cardiacas inesperadas, según ha informado este viernes la Generalitat en un comunicado.
Además, aunque muchos centros asistenciales españoles cuentan con planes de cardioprotección, el nuevo Hospital La Fe será el primero en cumplir con las recomendaciones del Consejo Europeo de Resucitación (ERC), que en 2005 editó una Guía específica elaborada por profesionales de la materia y que en 2010 va a ser actualizada. Asimismo, para los planes de formación, se seguirán las directrices de la Sociedad Española de Medicina Intensiva críticos y unidades coronarias (Semicyuc).
Uno de los impulsores de esta guía ha presentado en el Hospital La Fe las principales ventajas de contar con un plan personalizado en cardioprotección, Mr. Ken Spearpoint, enfermero experto de Resucitación en numerosos centros hospitalarios británicos y miembro de ERC, ha destacado "la importancia de disponer de un plan específico para cada recinto, así como de personal formado en el uso de desfibriladores".
El objetivo de tener un hospital cardioprotegido es disponer de una política preventiva y unos recursos adecuados para evitar muchas muertes por patologías cardíacas. Los especialistas aconsejan actuar en los primeros 3 minutos cuando se produce una de estas crisis y por cada minuto que se retrase la desfibrilación, las posibilidades de supervivencia se reducen un 10 por ciento. Por eso, estos equipos son de una gran utilidad por su facilidad de uso y las posibilidades de prestar ayuda al paciente casi al momento.
Para poner en marcha este plan, el Hospital La Fe invertirá más de 600.000 euros, tanto en equipamiento como en formación de personal, tanto sanitario como no sanitario, ya que el objetivo es que se dé respuesta rápida a paradas cardiacas en todo el recinto, incluidos los espacios asistenciales, pero también los almacenes, las cocinas, las aulas, las áreas administrativas o los archivos.
En concreto, el nuevo equipamiento comprende desfibriladores y carros de parada, así como el software apropiado para la recuperación cardiopulmonar, que además permitirá auditar las actuaciones de los profesionales ante las paradas cardiorrespiratorias acontecidas en el hospital, de forma que se puedan evaluar a posteriori todas las actuaciones realizadas. Este Plan de Resucitación asegura el cumplimiento de estas recomendaciones y su mantenimiento en el tiempo.
PLAN DE RESUCITACIÓN
El plan de resucitación desarrollado para el Hospital La Fe está completamente personalizado, aunque basado en las recomendaciones del Consejo Europeo de Resucitación (ERC en sus siglas en inglés). Se trata de una herramienta de trabajo tan importante como el equipamiento tecnológico, ya que supone previamente una evaluación del sistema actual de alerta y el modelo de respuesta a las emergencias.
Concretamente en el nuevo hospital habrá un punto de atención a la parada cardiorrespiratoria cada tres minutos a pie, compuestos por desfibriladores semiautomáticos y manuales y por carros de parada. La distancia entre los puntos viene marcada por el mapa de riesgo, que está basado en los tiempos de respuesta a la parada cardíaca y las situaciones de crisis dentro del hospital.
Estos puntos se incluirán en el Plan de Resucitación del Hospital La Fe. En este contexto, se entrenará y formará al personal sanitario y se llevará a cabo un seguimiento para actualizar constantemente el plan formativo.
Los desfibriladores semiautomáticos pueden ser utilizados por personas sin conocimientos médicos, ya que es el propio aparato el que detecta e indica cuándo es necesaria la descarga y aconseja que se realice. El usuario recibe indicaciones en voz alta de la máquina para proceder a la desfibrilación y estos equipos son válidos para atender a adultos o a niños.
Por su parte, los desfibriladores manuales y semiautomáticos completarán la red, pudiendo ser empleados por profesionales en la función manual, para que estos interpreten cuándo y en qué condiciones se deben realizar las descargas.
Junto a estos desfibriladores, La Fe dispondrá de carros de parada, que permiten atender una urgencia cardíaca desplazándose al punto donde esté el enfermo. Estos carros cuentan con una bandeja portadesfibrilador y una tabla para realizar un masaje cardíaco, además de otras prestaciones necesarias para la atención al paciente, como los cajones dispensadores de distintos fármacos.