CValenciana.-El Hospital de la Ribera implanta con éxito una prótesis auditiva totalmente invisible debajo de la piel

Actualizado: lunes, 6 abril 2009 17:23

VALENCIA, 6 Abr. (EUROPA PRESS) -

El servicio de Otorrinolaringología del Hospital Universitario de La Ribera en Alzira (Valencia) ha implantado con éxito a una paciente un sistema auditivo totalmente invisible que supone la última tecnología en este sector, según informaron en un comunicado fuentes de la Generalitat. El sistema se coloca debajo de la piel, y queda oculto, de manera que externamente no hay muestras visibles que indiquen que se lleva puesta una audioprótesis.

El Hospital de Alzira es uno de los primeros centros públicos de España en incorporar está última tecnología al servicio del ciudadano y se consolida, así, como "un centro referencia en sistemas auditivos", destacaron.

El jefe del servicio de Otorrinolaringología del Hospital Universitario de La Ribera, el doctor Javier Gisbert, destacó que esta tecnología "supone un gran avance en la calidad de vida de las personas que deben llevar un dispositivo auditivo y es una buena alternativa para aquellas personas adultas, con pérdida auditiva tanto conductiva como neurosensorial, de moderada a severa, que no quieren renunciar a una vida activa y que prefieren que no se vea que llevan una prótesis auditiva".

El dispositivo proporciona una señal de alta fidelidad directamente al oído medio, y facilita una función mejorada, comodidad y ventajas sobre otro tipo de sistemas, ya que permite apreciar sonidos de "gran precisión" como la lluvia o la nieve.

Asimismo, esta prótesis permite al paciente llevar a cabo actividades cotidianas como ducharse o practicar deportes como natación, aeróbic o tenis que, debido a la transpiración o la humedad no es posible practicar con los audífonos tradicionales.

El doctor Gisbert resaltó que, "de esta forma, el paciente mejora considerablemente su calidad de vida al tiempo que aumenta su autoestima", ya que este prótesis "le permitir llevar a cabo todo tipo de actividades personales y laborales y evita el estigma social al que se ven enfrentados muchas de las personas que sufren pérdida auditiva". Asimismo, las investigaciones revelan que con el nuevo implante aumenta la naturalidad y calidad de sonido.

DOS HORAS DE ANESTESIA

Este dispositivo se implanta durante una operación, que se realiza bajo anestesia general y que tiene una duración media de dos horas, en la que el cirujano realiza una incisión y un orificio detrás de la oreja. El implante está formado por tres partes principales, una cápsula que aloja los elementos electrónicos, un sistema de micrófono y un transductor.

Gisbert precisó que "el cirujano ancla el implante al hueso temporal del paciente, que se encuentra en los laterales del cráneo, y acopla el transductor a la cadena de huesecillos o cadena osicular, compuesta por martillo, yunque y estribo". Además, "en el caso de que haya algún defecto en esta cadena, el cirujano puede conectar el implante a otras estructuras anatómicas del oído, como a las ventanas oval o redonda", señaló.

De esta forma, "el implante deja totalmente libre el conducto externo del oído --cosa que no ocurre con otros audífonos tradicionales--, lo que permite percibir los sonidos de manera natural, eliminando percepciones insatisfactorias", agregó el jefe del servicio de Otorrinolaringología.

Una vez implantado, los sonidos se recogen a través del micrófono y se amplifican según las necesidades del paciente, convirtiéndose a continuación en una señal eléctrica que se envía, a través del cable del transductor cuyo extremo se encuentra en el oído medio. El transductor convierte las señales eléctricas en un movimiento mecánico que estimula directamente los huesecillos del oído y permite al paciente percibir el sonido.

Tras la operación, el cirujano cierra y venda la incisión, que tarda en cicatrizar entre seis y diez días. Después, el paciente debe esperar unas ocho semanas para que se le active el sistema. Por lo que respecta a la batería del dispositivo, ésta tiene un tiempo de vida media de unos 15 años, realizando una carga diaria y en el caso de necesitar cambiar, la cirugía es sencilla puesto que el transductor se mantiene intacto.