MÉRIDA 1 Dic. (EUROPA PRESS) -
El programa de cribado de cáncer del Servicio Extremeño de Salud (SES) llegará a un total de 60.000 extremeños de entre 60 y 65 años durante sus dos primeros años de recorrido en la región, y se prevé que 200.000 ciudadanos de entre 50 y 69 años se hagan este test de sangre oculta en heces en los ocho años que durará el plan.
En estos dos primeros años de cribado, se estima que serán detectados unos 350 casos de cáncer colorrectal en base a indicadores que cifran la incidencia de este tipo de tumor en cinco de cada 1.000 habitantes, de tal forma que esos 350 resultarían del cribado realizado a 60.000 extremeños.
Así lo ha indicado el presidente del comité técnico de la Asociación Española de Lucha Contra el Cáncer (AECC) en Extremadura y oncólogo, Fernando García Urra, en declaraciones a Europa Press, donde también ha señalado "la importancia" de la detección precoz del cáncer colorrectal, ya que, "si se coge a tiempo, en el 90 por ciento de los casos tiene cura".
De hecho, ha afirmado que si la enfermedad se coge "cuando aún no ha dado la cara", se puede tratar con una intervención quirúrgica vía endoscópica y sin tener que someterse a tratamiento de quimioterapia o radioterapia, puesto que en esto casos el tumor se encuentra "muy localizado".
Asimismo, ha asegurado que "no" se tienen datos "reales" sobre la incidencia del cáncer de colón en la región, al no existir un registro "único" de tumores y contar solamente con datos hospitalarios.
LABOR DE DIFUSIÓN DE LA AECC
En cuanto al programa de cribado, que arrancará en 2015, resultó de un acuerdo entre el Ministerio de Sanidad con las comunidades autónomas para que éstas incluyeran en su cartera básica este programa, ya que a juicio del Urra es "más contraefectivo" que incluso las mamografías, y "más barato", aunque "requiere la movilización de muchos recursos", ha apostillado.
Desde la AECC van a desarrollar una labor de "difusión" para que la gente "acuda al programa", ya que generalmente, ha señalado, en los programas de cribado de cáncer de colon "es difícil" fomentar la participación, por ello, ha continuado, la AECC quiere difundir un mensaje para animar a la "participación".
El procedimiento, ha explicado, consistiría en analizar las deposiciones para encontrar restos de sangre que pudieran indicar que existe una úlcera, hemorroides, pólipos o algo "más serio" como un tumor o pólipos "sin degenerar". "El cáncer es lo más infrecuente que se detecta en este tipo de pruebas, por debajo de un cinco por ciento", ha asegurado Urra.
DETECCIÓN PRECOZ
Por otra parte, ha indicado que al no contar en Extremadura con un programa de detección precoz del cáncer de colon, las pruebas se suelen realizar a aquellas familias con antecedentes de la enfermedad, a las que se les hace un test de sangre en heces, y "sólo si es positivo" se hace una colonoscopia.
En este sentido, ha explicado que en los casos de personas que no toleran esta técnica, existe otro tipo como son las colonoscopias con TAC, las cuales hacen una visualización digital del aparato digestivo.
Ambas son pruebas "más" costosas ya que requieren, en el caso de la colonoscopia, de sedación, una sala especial, medios sanitarios especiales, además de las horas del profesional especializado en este tipo de técnicas.
Sobre un futuro programa de detección precoz, ha avanzado que el Servicio Extremeño de Salud "quiere iniciarlo a lo largo de 2015" aunque aun no hay fecha prevista, lo que sí ha concretado es que estará "implantado" el próximo año, o en el inicio de su implantación.
La prevención y detección precoz es fundamental en la lucha contra el cáncer de colon que en el 70 por ciento de los casos aparece sin antecedentes familiares. Según los datos de la AECC, los programa de detección precoz mediante pruebas de sangre oculta en heces reducen un tercio la mortalidad por cáncer de colon, lo cual puede salvar más de 3.600 vidas al año.
Por último, ha indicado que la población con riesgo de padecer este cáncer es más alto cuanto "mayor es la persona", en este caso a partir de los 50 años, al tiempo que ha aseverado que este tipo de tumor es el "más frecuente" en España tanto en hombres como en mujeres, por encima del de mama o del pulmón, que se diagnostican más de 30.000 casos nuevos al año o unos 600 a la semana y que más de 14.00 personas fallecen anualmente por este motivo.
Según los datos de incidencia de la enfermedad en España de la AECC, la mayoría de los casos se diagnostican entre los 65 y los 75 años, con un máximo a los 70, aunque se registran casos desde los 35 a los 40 años. Los casos que aparecen a edades tempranas suelen tener una predisposición genética.